Romario Caicedo y Emelec: ¿Cómo la lealtad le costó miles de dólares al jugador?
¿Por qué Romario Caicedo no demandó a Emelec? La deuda que prescribió y su amor por el club.
El fútbol no solo es un deporte; también es un mundo lleno de historias de lealtad, desacuerdos y, a veces, injusticias. En el caso de Romario Caicedo, lateral derecho de Emelec, su amor por el club lo llevó a tomar una decisión que, al final, le costó dinero. ¿Qué pasó exactamente? Vamos a desglosar esta situación que ha generado polémica en el mundo del fútbol ecuatoriano.
La deuda de Emelec con Romario Caicedo
Los orígenes de la deuda y la postura del jugador
Romario Caicedo no es un jugador cualquiera. Es un futbolista que ha demostrado su compromiso con Emelec, tanto dentro como fuera de la cancha. Sin embargo, desde 2022, el club le adeuda una suma significativa de dinero. Caicedo, en lugar de recurrir a acciones legales, optó por confiar en la dirigencia y buscar un acuerdo amistoso. «Siempre quise llegar a un acuerdo sin necesidad de demandar, por el amor que le tengo a la institución», explicó el zaguero.
La prescripción de la deuda y su impacto
A pesar de sus buenas intenciones, el tiempo jugó en su contra. La deuda que Emelec mantenía con Caicedo prescribió, lo que significa que, legalmente, el club ya no está obligado a pagarle. Este hecho ha dejado al jugador en una situación complicada, ya que confió en que la dirigencia cumpliría con su palabra. «En diciembre revisamos las cantidades con contabilidad, y el miércoles me informaron que la deuda había caducado», relató Caicedo.
La relación entre Caicedo y Emelec
El amor de Caicedo por el club y su decisión de no demandar
Romario Caicedo no solo es un jugador profesional; también es un hincha de Emelec. Su conexión con el club va más allá de lo contractual. «Nunca quise demandar al club del que soy hincha y porque le agradezco a Emelec lo que he conseguido», afirmó. Su lealtad y paciencia, sin embargo, no fueron recompensadas.
La respuesta de la dirigencia y el llamado a la conciencia
Caicedo no busca generar polémica, pero sí pide justicia. «La dirigencia debería ponerse la mano en el corazón y pagarme lo que me corresponde», expresó. El jugador espera que, a pesar de la prescripción, el club reconozca su esfuerzo y le pague lo adeudado. «Por ser bueno, perdí. No confundamos lo uno con lo otro», añadió.
Conclusión
La historia de Romario Caicedo y Emelec es un recordatorio de que, en el fútbol, la lealtad no siempre es correspondida. Aunque Caicedo decidió no demandar por amor al club, su confianza no fue recompensada. Este caso abre un debate sobre la justicia y el trato que reciben los jugadores, especialmente aquellos que dan todo por sus equipos.
FAQs
- ¿Qué es una deuda prescrita?
Una deuda prescrita es aquella que, por el paso del tiempo, ya no puede ser reclamada legalmente. - ¿Por qué Romario Caicedo no demandó a Emelec?
Caicedo no demandó por amor al club y por confiar en que la dirigencia cumpliría con su palabra. - ¿Qué pide Romario Caicedo a la dirigencia de Emelec?
Caicedo pide que la dirigencia «se ponga la mano en el corazón» y le pague lo que le corresponde, a pesar de la prescripción de la deuda.
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