«¿Por qué no podemos sacar la bandera al balcón sin que nos llamen fachas?»

«¿Cómo hemos llegado a la situación en la que no podemos estar orgullosos de ser españoles y mallorquines y sacar nuestras banderas al balcón sin ser tachados de fachas?». El estudioso mallorquín Mateo Cañellas lanza la pregunta pero guarda una respuesta en la recámara que apunta a un claro culpable: «La izquierda española». «Nuestra izquierda ha renunciado al concepto histórico nacional y al pasado histórico español , ya que identificaba a Franco con España. Lo ha hecho a diferencia de sus correligionarios franceses y alemanes, que no renunciaron a su nación ni a la historia de sus respectivos países», sentencia el investigador, que este jueves ofrece una conferencia para desmontar la leyenda negra y el expolio catalanista en el teatro Sa Societat de Calvià, a las 19.30 horas. Colaboran el Ayuntamiento de Calvià y Societat Civil Balear. Según su tesis, durante el franquismo se recurrió en exceso a la exaltación de los valores imperiales, como la Reconquista, los Reyes Católicos, la Conquista de América, Carlos V, Felipe II. A lo que hay que añadir la «estrecha ligazón» de los reyes españoles con la religión católica. «Todo ello dio como resultado la utilización de la leyenda negra como una nueva arma contra la derecha española», prosigue Cañellas, que asegura que la izquierda española está «anclada a la dictadura franquista» y ha acabado derivando hacia «derroteros federalistas, plurinacionales o directamente independentistas». Mateo Cañellas es autor de varios libros donde documenta «la dictadura catalanista» que padece Baleares desde hace décadas, y otros trabajos donde defiende que en Baleares «no hablamos catalán» sino mallorquín. En su nueva obra La leyenda negra y expolio catalanista (Amazon) analiza estos dos conceptos y avisa de que «tienen muchas coincidencias, sobre todo en quienes los están enarbolando». «En los últimos 40 años, se ha dado un fenómeno con muchas similitudes, procedente de los mismos sectores intelectuales y políticos desde la izquierda balear y la izquierda española. Un odio y desprecio a Baleares y a España protagonizados por el Expolio Catalanista y por la Leyenda Negra en España». Don dos caras de la misma moneda, dice. «Dos exitosas campañas basadas en mentiras y tergiversaciones de la realidad». Cañellas detalla que la leyenda negra resurgió de manos de la izquierda española hace 40 años, mientras que el expolio catalanista viene de más atrás, durante el reinado de Fernando VII cuando se implantaron sus «cimientos» con un hecho «trascendental» como fue la desaparición de la Universidad Literaria de Mallorca después de cuatro siglos de existencia. «Su desaparición propició que gran parte de las élites intelectuales mallorquinas comenzasen su proceso de subordinación cultural a Cataluña, lo que ha desembocado en un grave complejo de inferioridad al menospreciar la milenaria cultura baleárica frente a la cultura catalana». Según Cañellas, la política centralizadora de universidad de Fernando VII abocó a muchas de ellas al cierre, entre ellas la mallorquina. En 1829 se cerró y en 1842 quedó incorporada a la universidad de Barcelona. «Ahí empezó el expolio catalanista a la lengua, la cultura y la historia de Baleares», asegura con rotundidad, ya que a partir de entonces «los baleáricos tuvieron que desplazarse a Barcelona para cursar sus grados de Medicina, Derecho o Teología». Era la época de la incipiente Renaixença catalana en la que se reivindicaba un «supuesto pasado glorioso y antiquísimo» de su nación catalana que incluía a los antiguos Reinos de Valencia y Mallorca. «Tampoco hay que olvidar que con Fernando VII se reavivó la leyenda negra», prosigue Cañellas, cuando España empezó su declive. «Estos casi tres siglos de propaganda antiespañola -la leyenda negra- fueron utilizados por las nuevas futuras repúblicas hispanoamericanas para su emancipación», lamenta. «Con la llegada del enfrentamiento entre España y sus territorios de ultramar, aquellos que decidieron emanciparse e iniciar su proceso de independencia recurrieron a la leyenda negra como una de las mejores propagandas contra el imperio. Con ello se comenzó a ver la deshispanización como la fórmula mágica contra los males que arrastraban los virreinatos», concluye el autor. «Todo era culpa de España y aún siguen».