Sánchez desoye la petición de Page de nuevos recortes al trasvase Tajo-Segura al paralizarlo por obras cuatro meses en 2025

El Gobierno tiene intención de acometer obras en el acueducto del Tajo-Segura que paralizarán los trasvases al menos cuatro meses en 2025, lo que frustra la pretensión declarada del presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, de un cambio de las reglas de explotación en el que confía para nuevos recortes en el volumen de las transferencias al sureste peninsular. Hace sólo unos días, se lo había vuelto a pedir con urgencia a Pedro Sánchez en su reunión en Moncloa , pero tendrá que esperar, porque estos trabajos periódicos abren un paréntesis temporal sin posibilidad de modificaciones del funcionamiento. Por su parte, los regantes usuarios valoran estos trabajos en positivo para un aprovechamiento sin fugas en las conducciones y consideran este paréntesis un proceso habitual en ese periodo del año. Tal como ha informado recientemente la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura -dependiente del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfica- a la Asociación de Municipios Ribereños del Tajo, se cerrará temporalmente esta infraestructura hídrica por reparaciones al menos hasta abril, como ya ocurrió a principios de este año. «Todos los años hay mantenimientos en el canal, nos interesan, pues son para prevenir pérdidas de agua», ha detallado Lucas Jiménez , presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo Segura (Scrats). Aunque las dotaciones de agua mensuales previstas y autorizadas no se pierden, sino que quedan pendientes de envío, la posible repercusión va a depender de la capacidad de almacenamiento durante ese compás de espera . El funcionamiento es de volúmenes asignados para todo el año hidrológico completo, que acaba de arrancar y concluirá en septiembre de 2025, aunque cada comunidad de regantes afrontará este imprevisto en función de la cantidad de agua que puede tener en embalses a su alcance. A priori, los dos principales pantanos de la cuenca del Segura (Fuensanta y Cenajo) bajo mínimos y en nivel de «embalse en fondo muerto», uno de ellos al 6%. No obstante, tienen margen de tiempo para hacer ahorros de aquí a final de año, porque por suerte acaban de aprobarse trasvases mensuales de 27 hm3 para octubre, noviembre y diciembre , antes de esos trabajos de mantenimiento. «Se empezará a trasvasar para poder asumir el parón bien; así se hace habitualmente», ha corroborado Jiménez, tras esa última decisión de la Comisión de Explotación, este misma semana. Otro efecto positivo será que en la cabecera del Tajo incluso mejorarán unas cifras récord, por encima de la barrera de los mil hectómetros cúbicos de agua entre Buendía y Entrepeñas, los dos pantanos suministradores del trasvase, como no se habían visto en la última década y duplicando la media de ese periodo. En la Asociación de Municipios Ribereños del Tajo perciben las obras en el acueducto como una mala noticia, en su caso, al igual para para Page, porque eso retrasa la anunciada modificación de las reglas de explotación , que previsiblemente puede dar otra vuelta de tuerca para cerrar el grifo a Alicante, Murcia y Almería, tal como se barruntan los regantes del sindicato Scrats. También alimenta ese temor de estos agricultores -y las expectativas en positivo para esos municipios de la zona de Guadalajara- la presión del presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, para que el Gobierno cambie esas normas de funcionamiento del acueducto cuanto antes, la última vez, hace sólo unos días en su encuentro en persona con Pedro Sánchez.