Grupo Mixto, la extraña convivencia entre la izquierda y la derecha
Se sientan juntos para decidir las intervenciones, el reparto de los tiempos y las portavocías de las comisiones. No tienen reglas internas, se organizan de manera autónoma. Y asumen que su lugar en el hemiciclo, salvo excepciones, es el gallinero, las ultimas filas de ambas Cámaras, adonde van a parar los que solo cuentan con uno o dos diputados. "Y no hay ningún problema. Y si lo hay, se solventa pronto", coinciden sus integrantes.