Núcleo Nacional, el grupo que busca una “solución antidemocrática” para “conquistar el Estado”
Cuatro miembros de Núcleo Nacional interrumpieron el pasado sábado el podcast que emitían en directo Samantha Hudson y María Barrier desde el Teatro La Plazeta de Valencia, donde lanzaron gritos contra la primera de ellas por unos supuestos “comentarios pedófilos”. Tras ser desalojados por el público, este grupo ultra se jactó en sus redes sociales de haber paralizado la actuación de “un hombre con peluca”, en referencia a la identidad trans de una de las conductoras del programa.
Núcleo Nacional. “Nosotros no creemos en la democracia. Nuestro objetivo es la conquista del Estado para devolver las leyes naturales, el orden, la defensa de la propiedad privada y la familia. Hay que abandonar ese buenismo de la paz porque hoy la paz supone la muerte de la nación”. Así definió uno de los promotores de Núcleo Nacional el proyecto en el que se han embarcado decenas de jóvenes bajo un discurso apocalíptico y basado en que España se conduce a la ruina. Esa ruina la encarnan —según su punto de vista— los homosexuales, las personas trans, la inmigración, la OTAN, las políticas liberales, los judíos, las “élites globalistas” y un largo etcétera.
Origen. Esta organización ultra se dio a conocer de manera oficial el 14 de abril de 2024 con una presentación en el Espacio Ardemans, un local utilizado por grupos de extrema derecha como Facta o Falange. Su canal de Telegram empezó a operar antes, en enero, y pronto aparecieron grupos en varias comunidades autónomas que supieron aprovechar la movilización surgida de las manifestaciones contra la ley de amnistía.
Los líderes. Aunque la mayoría de sus miembros ocultan sus rostros con bragas o pasamontañas, algunos de sus portavoces sí han aparecido a cara descubierta. Por eso se sabe que la cúpula de Núcleo Nacional —al menos aquella que no se oculta— está compuesta por una miscelánea de falangistas, influencers de la conspiración, antiguos miembros de España2000 e, incluso, un concejal de un pueblo madrileño que procede del partido Hacer Nación.
Los más visibles son un influencer que utiliza el alias ‘Gallego Despotricando’ (pero que fuera de las redes responde al nombre de “Iván”); Enrique Lemus, que proviene del partido ultra Democracia Nacional; un encapuchado que se presenta como “una rana baneada”; el falangista Carlos Paz; el concejal Pedro Jesús Espada, con asiento en el pleno municipal de Velilla de San Antonio (Madrid) y vinculado al partido Hacer Nación, y Carlos Areta, un difusor de teorías de la conspiración en canales de YouTube y Twitch.
“El 4% de la población tumbaría un régimen”. Núcleo Nacional tiene un discurso antisemita y se sitúa a la derecha de Vox; de hecho, se refieren al partido de Santiago Abascal como “el de los posavasos en la cabeza”, en alusión a la kipá de los judíos. Sus intervenciones están plagadas de los clichés más habituales de las narrativas antiglobalistas, como la decadencia de Occidente frente a la gloria de Rusia, y consideran que para sortear “los tiempos finales de esta gran nación” —en referencia a España— se necesita una “solución antidemocrática”. Esa solución la explicó uno de sus representantes, ‘Gallego Despotricando’, en una entrevista con un youtuber: “El 4% de la población [española] tumbaría un régimen. Se plantan en Madrid y tumban un régimen”, dijo.
La conexión pro-Kremlin. Como muchos grupos de extrema derecha, Núcleo Nacional ve sintonía con el régimen ruso. Uno de sus portavoces, Carlos Areta, ha asegurado que Rusia es “la esperanza de Europa” frente a la OTAN y la Unión Europea. Asimismo, el falangista Carlos Paz, uno de los oradores que participó en el acto de presentación del grupo ultra en abril, ha sido invitado en varias ocasiones a fiestas y convites de la Embajada de Rusia en Madrid (1, 2).
Investigados por la Policía. El diario ABC publicó el pasado mes de mayo que la Policía Nacional investiga a Núcleo Nacional por sus posiciones antisemitas. Según este periódico, el grupo ultra integra a miembros de otras organizaciones violentas como los Ultras Sur, Bastión Frontal y skinheads. Además, este grupo estaría detrás de un ataque perpetrado el pasado 24 de mayo contra la acampada propalestina de la Universidad Complutense de Madrid.