Trump insiste en que Colón fue "el verdadero héroe americano" y asume sus orígenes genoveses: "Hemos vuelto, italianos"
En vísperas del Día de los Pueblos Indígenas, celebrado como alternativa al Día de Colón, el presidente estadounidense Donald Trump difundió una proclama en la que reivindicó la figura del navegante genovés y condenó a quienes, según sus palabras, “han intentado destruir su legado”. En el texto, Trump calificó a Cristóbal Colón como “un verdadero héroe estadounidense” y criticó lo que llamó los intentos de “pirómanos de izquierda” por borrar su memoria y derribar sus estatuas.
Durante su mensaje, el presidente afirmó que Colón fue “un gigante de la civilización occidental” y un referente de “fe, coraje y perseverancia”. Asimismo, aseguró que bajo su liderazgo “terminaron los días en que se atacaba a los héroes nacionales” y defendió la celebración del Día de Colón como un símbolo del “orgullo cultural y religioso” de Estados Unidos. Trump también destacó la influencia de la comunidad italiana en el país y concluyó su discurso afirmando: “Estamos de vuelta, italianos”.
Históricamente, la figura de Cristóbal Colón ha sido objeto de debate por el impacto de sus viajes en las poblaciones nativas americanas. Aunque su llegada a América en 1492 abrió nuevas rutas para Europa, también dio paso a la expansión colonial, la introducción de enfermedades y la esclavización de comunidades indígenas. A pesar de ello, Trump defendió su legado como fundamento de la identidad estadounidense y rechazó los cuestionamientos sobre su papel histórico.
Un contraste con la visión de Biden
El actual presidente, Joe Biden, adoptó una posición distinta al reconocer oficialmente el Día de los Pueblos Indígenas, destacando la resistencia y la diversidad cultural de las comunidades nativas. En su proclamación, Biden subrayó la necesidad de reconocer los abusos cometidos durante la colonización y el desplazamiento forzado de pueblos originarios, al tiempo que valoró su contribución a la historia y la sociedad de EE UU.
Biden afirmó que la celebración busca honrar “la persistencia y la fortaleza de los pueblos indígenas” y reconocer las políticas históricas que les provocaron “crueldad, violencia e intimidación”. Su mensaje contrastó abiertamente con el de Trump, al poner el énfasis en la reparación histórica y en la diversidad cultural frente a la exaltación del pasado colonial.