Delegado de afición
El tono del fútbol femenino de elite ha mejorado al masculino, en general, en el apartado de gresca, juego sucio, insultos o ‘fair play’. No acostumbran a existir las tanganas propias de otras épocas, teniendo en cuenta que el masculino también ha mejorado con el paso de los años y las normas y el seguimiento impuesto en el fútbol de altura. Pero el fútbol base, que debería seguir el ejemplo, no lo hace. En fútbol femenino comienzan a verse partidos con actitudes más violentas o despectivas. El paso del escolar al federado significa en muchas ocasiones un salto peor en actitudes de jugadoras y, sobre todo, en la grada.