Los primeros ‘talonarios’ de la historia: palos de hueso y madera revelan el origen real del dinero
La investigación internacional cuestiona el relato clásico del trueque y sitúa los primeros usos del dinero en el ámbito de la fiscalidad y el poder político
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Un equipo internacional de investigadores ha reunido evidencias arqueológicas de Inglaterra, China y la cultura maya que desmontan uno de los relatos más repetidos en manuales de economía: que el dinero nació como una solución al trueque. El estudio, publicado en la revista científica Journal of Economic Issues y liderado por Robert M. Rosenswig, de la Universidad de Albany, demuestra que los primeros registros materiales asociados al dinero eran varillas de madera o hueso (los llamados tally sticks), empleadas para anotar deudas, impuestos y tributos, no para facilitar intercambios comerciales.
La explicación tradicional sostiene que el dinero surgió para resolver el problema de la “doble coincidencia de deseos”: la dificultad de encontrar a alguien que quisiera exactamente lo que uno ofrecía a cambio. Esa visión ha dominado la enseñanza de la economía durante décadas, reforzada por autores clásicos como Adam Smith y repetida en manuales de introducción. La nueva investigación, sin embargo, muestra que la realidad fue mucho más compleja y estuvo estrechamente ligada al poder político.
Qué eran los 'tally sticks'
Los tally sticks eran varillas en las que se practicaban muescas o inscripciones para llevar la cuenta de pagos y deudas. El estudio documenta ejemplos en tres civilizaciones muy diferentes. En todos los casos su función era contable: reflejaban tributos, préstamos o entregas de bienes, y en ningún caso eran simples instrumentos de trueque. Según los autores, esto demuestra que el dinero nació como una herramienta de registro y fiscalidad antes de convertirse en medio de cambio generalizado.
Ejemplos documentados: los casos de Inglaterra, China y la cultura Maya
En Inglaterra, los tally sticks se usaron durante siglos en el Exchequer real. Servían para registrar impuestos y deudas contraídas con la Corona, hasta el punto de que fragmentos de estas varillas circularon como títulos de crédito respaldados por el Estado. El trabajo cita el caso de un préstamo millonario concedido a Guillermo III que quedó registrado en una de estas piezas y nunca llegó a saldarse, ilustrando su papel como mecanismo de deuda pública.
En China, los investigadores documentan tallies de bambú empleados desde el siglo III a.C. por la administración imperial. Su función era controlar el movimiento de bienes como grano, seda o monedas, y fueron descritos incluso por Marco Polo en el siglo XIII. Estas varillas, custodiadas por funcionarios, se usaban para acreditar entregas y pagos en el marco del sistema tributario, lo que refuerza la idea de que eran instrumentos ligados al poder político más que a la economía de mercado.
El caso maya aporta una tercera pieza al puzzle. Se han hallado tally sticks de hueso en contextos que van del siglo VI al IX, vinculados tanto a escenas cortesanas como a rituales funerarios. Según el análisis, estos objetos estaban asociados al registro de tributos en especie, como alimentos o productos agrícolas, lo que los convierte en testigos directos de cómo se organizaban las relaciones de poder y las obligaciones fiscales en el mundo precolombino.
Eran sistemas de contabilidad
El hilo común entre estas tres culturas es claro: los tally sticks funcionaban como sistemas de contabilidad. Lejos de ser una evolución natural del trueque, el dinero aparece ligado al poder estatal y a la necesidad de registrar deudas y tributos. Para los autores, esto obliga a revisar la visión ortodoxa de la historia económica y a situar la fiscalidad y la autoridad política en el centro del origen del dinero.
Este estudio es el primero que compara hallazgos de tres regiones tan distintas para llegar a una conclusión conjunta. Sus resultados refuerzan la idea de que el dinero no nació de intercambios espontáneos entre particulares, sino como una construcción social e histórica vinculada a la administración de recursos y a la recaudación. Una aportación que abre nuevas vías de investigación sobre los orígenes de la economía y sobre el papel que las instituciones desempeñaron en su desarrollo.