Come en el bar de Karlos Arguiñano y la gente se queda sin palabras por el precio que paga por sus platos: «No me creo...»

En España contamos con varios chefs reputados que también se han vuelto estrellas televisivas por diferentes motivos, como presentar concursos de cocina como Jordi Cruz, tener su propio documental como Dabiz Muñoz o contar con un programa de cocina particular como es el caso de Karlos Arguiñano. Este último es uno de los cocineros más populares en nuestro país, además de por sus recetas y platos, por su saber hacer y su personalidad campechana y cercana con el público. Arguiñano lleva entre fogones desde 1978, año en que decidió abrir su primer restaurante y, desde entonces, ha publicado decenas de libros de cocina y ha pasado por varias cadenas de televisión cocinando sus recetas más cotidianas y acercadas a la realidad del público en la cocina, siendo su programa de cocina un clásico de la televisión desde hace años. En su trayectoria de más de 30 años en la televisión, ha ganado diferentes premios y ha conseguido meterse al público en el bolsillo y mantener su fama intacta con el paso del tiempo, siendo uno de los cocineros españoles más mediáticos . Es por ello que son muchas las personas que se deciden por ir a probar su cocina a su restaurante, ubicado en su tierrra, País Vasco, concretamente en la localidad guipizcoana de Zarautz. Se trata del Hotel Restaurante Karlos Arguiñano , el cual se encuentra en un antiguo palacete llamado Villa Alaia, donde el chef ofrece multitud de recetas típicas de la gastronomía española y vasca. Hasta allí se trasladó Edurnyx, creadora de contenido centrada en la gastronomía que ha querido comprobar cómo de buenas son las preparaciones de Arguiñano en su propio bar-restaurante . Tal como mostró en uno de sus vídeos de TikTok, la joven se decantó por pedir pintxos en lugar de platos de cuchara o más elaborados. Entre ellos, se decantó por escoger dos gildas, una de boquerón y otra de anchoa, dos pinchos de ensaladilla rusa, uno sin bonito y otro con, adornado con piparra y anchoa. Por último pidió también un pincho de tortilla con cebolla y pan. El Txakolí K5 de Arguiñado fue la bebida con la que acompañaron la degustación de los platos y, al probar este vino la joven afirmó lo siguiente: «Van a caer unas cinco copas por lo menos» , con lo que dio a entender que le había encantado. Con cada bocado también mostraba la satisfacción y agrado en boca, indicando si algunas elecciones le habían convencido más que otras, aunque le pareció que todo estaba muy bueno. El momento de la verdad llegaba al enseña r la cuenta, que ha causado opiniones muy diferentes entre los usuarios de la red social. El precio final fue de 24,10 euros , contando que comieron dos personas, por lo que da a entender la joven quien también puso en valor el entorno del restaurante y sus vistas, ya que está ubicado frente al mar. Como adelantábamos, este precio ha sorprendido tanto para bien porque les parece barato para ser el restaurante de Arguiñano como para mal porque les parece algo caro al tratarse de pintxos. Así, los comentarios en el vídeo de la joven que ha ido al restaurante de Arguiñano reflejan la disparidad de opiniones. Estos son algunos ejemplos: «¿No se han equivocado con la cuenta? Lo veo muy barato » «Estuve hace unos años comimos muy bien, Arguiñano estaba allí y en las distancias cortas no es tan simpático como parece» «Solo te vale eso el vino... No me creo ese precio » «Pero esas tapitas te las comes en cualquier bar ¿no?» « Me parece un poco caro para ser unos pinchos» «Está genial de precio de verdad. Para ser esa ubicación y un sitio famoso. Algunos se aprovechan demasiado» «¿Eso son tapas? ¿No se supone que solo pagas el trago y las tapas son gratis?».