Sigue la lucha de dos padres de Toledo por recuperar la custodia de su bebé retirada por la Junta

Casi dos meses y medio. Ese es el tiempo que Yumara Oliver (19 años) y Abdel Tahiri (32 años) llevan separados de su hija, una bebé que nació a principios de diciembre en el Hospital Universitario de Toledo y que, nada más nacer, el 12 de ese mismo mes, el Servicio de Menores y Familia de la Delegación de Bienestar Social de esa provincia les retiró la custodia de la niña y lleva desde entonces con una familia de acogida. El motivo es que la madre, según los informes de ese departamento, fue una mujer tutelada igualmente desde los nueve hasta los 18 años tras sufrir maltrato y abandono por parte de sus padres. Esta noticia, adelantada por El País hace unas semanas, sigue suscitando polémica porque el abogado de la pareja, Julián Sánchez Rojas , pelea desde entonces, junto con ellos, para recuperar a su pequeña. De hecho, según informa este diario, Yumara y Abdel han asistido a todas las citas a las que los han convocado en la Delegación de Bienestar Social, a todas las visitas para ver a su hija (en un régimen impuesto de una al mes de una hora de duración), y han mantenido ya tres entrevistas (una de ellas en su propia casa) con las asistentes de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Toledo. De momento, desde Bienestar Social del Gobierno de Castilla-La Mancha insisten en que «el caso está judicializado y no podemos dar datos para proteger a la menor», tal y como ha manifestado este lunes en una rueda de prensa la misma consejera, Bárbara García Torijano . Preguntada por los periodistas sobre este asunto, ha querido dejar claro que son los profesionales técnicos los que deciden qué es lo mejor para los menores, que en este caso fue la retirada de la bebé con una familia de acogida. «Es un trabajo que se hace con mucho rigor y nunca es fácil», afirma García Torijano, que asegura que «cualquier decisión es siempre por el bien de los menores». Mientras tanto, Yumara y Abdel seguirán luchando y viven pendientes de lo que decida el juez del juzgado de Instrucción número 1 de la ciudad de Toledo, que es quien está investigando si esa retirada de tutela está justificada.