Mónica García insta a los médicos a prescribir inhaladores "sostenibles"
El Ministerio de Sanidad ha lanzado un documento con recomendaciones para promover una prescripción más sostenible de inhaladores, con el objetivo de reducir el impacto medioambiental de estos dispositivos. En él, se prioriza el uso de inhaladores con baja huella de carbono, dado que los inhaladores presurizados son responsables del 10% del impacto generado por la producción y el uso de medicamentos.
Javier Padilla, secretario de Estado de Sanidad, destacó que esta guía recomienda priorizar inhaladores con menor impacto medioambiental, especialmente en el diagnóstico o cuando se requiera cambiar el inhalador. Sin embargo, enfatizó que no se recomienda un cambio generalizado a inhaladores más ecológicos, sino que deben considerarse primero la estabilidad clínica de los pacientes y la reducción de las reagudizaciones, especialmente en casos de nuevo diagnóstico o mal control terapéutico.
Padilla explicó que las decisiones sobre qué inhalador utilizar deben basarse en criterios clínicos y la opinión del paciente. Los inhaladores de polvo seco y de niebla fina tienen un impacto medioambiental menor en comparación con los de cartucho presurizado, que generan un mayor impacto. Además, destacó que los pacientes que usan inhaladores son más vulnerables a los efectos de la contaminación y la calidad del aire.
Según datos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), los inhaladores presurizados representaron el 46% de los inhaladores prescritos en el Sistema Nacional de Salud en 2023, lo que equivale a unas 400.000 toneladas de CO2 anuales, aproximadamente el consumo eléctrico de 85.000 hogares durante un año.
Padilla subrayó que la mejor forma de reducir el impacto medioambiental es que los pacientes mantengan una buena salud, y que este documento forma parte de los esfuerzos del Ministerio para avanzar en la transición ecológica del sistema sanitario, siempre con el paciente como centro.
Por su parte, Héctor Tejero, responsable de Salud y Cambio Climático en el Ministerio de Sanidad, destacó que los inhaladores presurizados son "insustituibles" y esenciales para la calidad de vida de muchos pacientes. Aunque reconoció la importancia de la huella de carbono, afirmó que la prescripción debe ser "individualizada y consensuada" con el paciente, sin considerar el impacto medioambiental de manera aislada.