La vida personal de Marcelo Vieira: su novia de toda la vida, sus negocios y el papel de su abuelo en su carrera

El brasileño Marcelo Vieira , uno de los mejores laterales izquierdos de los últimos tiempos en el Real Madrid , acaba de anunciar su retirada del fútbol a los 36 años. Él mismo lo comunicó el pasado jueves a través de sus redes sociales tras haber pasado buena parte de su carrera en el club blanco y una última etapa profesional al club de su corazón, el Fluminense de Rio de Janeiro, en el que empezó. Su trayectoria estará siempre ligada también al Real Madrid, club con el que llegó a ganar 25 títulos, entre ellos cinco Champions. El cuadro merengue lo fichó cuando apenas tenía 18 años y aquí pasó 16 temporadas dando lo mejor de sí. Llegó a ser incluso uno de los capitales y salió en seis ocasiones en el once ideal de la FIFA. Precisamente por ello, varios excompañeros como Cristiano Ronaldo, Vinicius Jr, Thibaut Courtois, Ángel Di María, Lucas Vázquez, Jesé o Kiko Casilla han aprovechado sus redes para aplaudir su carrera. Además de este baño de masas en redes, esta noche previsiblemente otro en su visita a 'El Hormiguero' de Pablo Motos , donde repasará su trayectoria y posiblemente también descubrirá algún aspecto de su faceta menos conocida y más personal. Marcelo Vieira da Silva Júnior (Río de Janeiro, 1988) se crio en el humilde barrio de Catete y desde joven vivió obsesionado con el fútbol. A los 13 años, de hecho, empezó a entrenar con el Fluminense Football Club arropado desde el principio por su abuelo Pedro , que fue su guía en la infancia y que también fue el encargado de pagar las cuotas al club para que él pudiera jugar. No es que quisiera que fuera futbolista si no que fuera feliz, recuerda siempre el futbolista ya retirado. Allí vivió un debut soñado para muchos: anotó un gol, algo no habitual en su carrera, y lo celebró formando con los dedos una clara 'C' en alusión a su entonces pareja Clarice . Ella, su novia de toda la vida después de que la conociera de joven gracias a un compañero de fútbol que era hermano de ella, ha sido uno de sus grandes pilares a lo largo de toda su trayectoria. Ambos se casaron en 2008 y un año después vieron nacer a su primer hijo, Enzo, mientras que en 2015 llegó Liam. Clarice es una conocida actriz en su país, además de WAG y, como Marcelo, es una amante de los animales. La familia tiene tres perros, Nalla, Thaig y Lola, muy presentes en sus redes sociales. De su perfecta historia de amor ambos siempre recuerdan un momento algo embarazoso y es que el día de su boda, en Río, Marcelo perdió los anillos. «Pensaban que estaba bromeando y no me creían», rememoró él hace un tiempo en una entrevista en La1 en la que desveló un final feliz: el bolsillo del traje estaba medio roto y las alianzas se colaron por el forro. En Madrid, club al que llegó en 2006 con 18 años, Marcelo sintió haber conseguido el éxito profesional y la estabilidad personal perfecta. Seguramente por ese motivo acabó solicitando la nacionalidad española, que consiguió en 2011 y que le permitió jugar como comunitario. Aquí sin embargo también vivió amargos momentos en 2018, cuando la justicia española lo condenó por un fraude a Hacienda, un caso por el que acabó con una multa diaria de 350 euros durante diez meses. Además de ella, su abuelo Pedro, que falleció en 2014 en pleno Mundial de Brasil al que Marcelo participó, tiene un lugar también muy especial en su corazón. Los goles que ha hecho han ido siempre dedicados a él, del que llega a asegurar siempre que fue la clave para que pudiera dedicarse al fútbol. Más allá del fútbol, el lateral brasileño también ha tenido tiempo para los negocios : es propietario de dos clubes de Segunda División, uno en Brasil y otro en Portugal, junto a su cuñado, el hermano de Clarice. Muchos imaginan que ahora intentará ampliar su faceta de empresario del fútbol ahora que no tiene que cumplir con entrenamientos ni convocatorias.