Ocho ideas rápidas para montar una cena de picoteo en Nochevieja

Faltan pocas horas para el fin de año y vas a celebrarlo en casa con amigos o miembros de la familia. Se trata de un momento único, en el que compartir el cierre del año y el comienzo de otro con los que más quieres, pero no te apetece ponerte a cocinar recetas muy elaboradas para tantas personas. Lo más sencillo para celebrar la cena de Nochevieja es disponer de una serie de platos para picar que den variedad y sabor a esta noche especial, en la que, por supuesto, no pueden faltar las uvas para comer al ritmo de las campanadas sin atragantarse.

Aquí te proponemos ocho ideas de aperitivos para disfrutar de la Nochevieja en la mejor compañía.

Ahumados

Una bandeja de ahumados es prácticamente una obligación en cualquier cena de Nochevieja que se precie. Por ejemplo, se pueden preparar unas tostas de pan con queso fresco, sobre las que se colocan unas rodajas finas de pepino y el salmón ahumado en forma de rollito.

Otra opción es partir en dos mitades unas cebolletas y cocinarlas a la plancha. Sobre cada mitad se añade unas láminas de atún ahumados, con unas gotas de aceite y orégano.

El bacalao ahumado, por su parte, se puede poner en medio pimiento de piquillo y mezclarlo con cebolleta y unas gotas de aceite.

La anchoa ahumada se enrolla en una piparra y se inserta en un palillo a modo de banderilla.

Champiñones rellenos

Los champiñones rellenos son una de las recetas de aperitivos clásicos para encuentors familiares. Los clásicos son los rellenos de jamón y queso philadelphia, pero existen muchas más combinaciones como los rellenos con gambas, jamón serrano, verduras o salsa bechamel.

Tras limpiar los champiñones e introducir el relleno con la ayuda de una cucharilla, se cubren de queso parmesano rallado o de cualquier queso para gratinar, se precalienta el horno y se hornean durante 20 minutos.

Gambas al ajillo

Sin duda las gambas al ajillo son una tapa perfecta para abrir boca. Si sueles evitar las comidas contundentes por la noche, querrás hacer una excepción con este plato.

En primer lugar, es importante que cuentes con una fuente de barro. Debes asegurarte de que sea apta para ponerla en el fogón.

Calienta la cazuela de barro con un fondo de aceite de oliva y añade ajo fileteado y cayena. Dóralos a fuego medio o bajo, para que el ajo no se queme.

Una vez estén los ajos hechos y el aceite burbujeante, incorpora las gambas limpias y peladas. Añade una pizca de sal y cocínalas a cada lado durante un minuto. Después, tápalas con un plato durante cinco minutos para que se cuezan por dentro. No te olvides de servir tus gambas al ajillo en la misma fuente de barro con la que las has cocinado.

Tabla de embutidos y quesos

Para la preparación de una buena tabla de quesos y embutidos no pueden faltar los ibéricos como el jamón o el chorizo. También se puede añadir longaniza, lomo embuchado, salchichón o salami. Para los quesos puedes jugar con los aromas, la curación, la intensidad o los diferentes tipos de leche -vaca, oveja, cabra, mezcla. Algunos de los quesos recomendados son los quesos ahumados, el queso brie, el parmesano, el gorgonzola, el queso azul, el queso de cabra, el queso curado o semi curado o queso tierno.

Canapés

Los canapés tienen un papel fundamental en cualquier mesa de Nochevieja. Estos pequeños bocados son rápidos de hacer y deliciosos. Proponemos canapés de higos con queso de cabra y miel, una tostada de guacamole con boquerón en vinagre, oliva verde, alcaparras y cilantro o un canapé de paté con higos, queso gouda y hoja de menta.

Gambas o langostinos cocidos

Para preparar unas buenas gambas o langostinos cocidos hay que contar con una olla con agua y sal. La cantidad de agua variará dependiendo de la cantidad de marisco que se cueza, pero debe ser abundante para que las gambas y langostinos queden sumergidos dentro de la olla

Se recomienda utilizar entre 50 y 70 gramos de sal por cada litro de agua. Después hay dejar que el agua con sal hierva antes de introducir el marisco. Cuando arranque la ebullición después de añadir las gambas o langostinos hay que contar un par de minutos antes de retirarlos. Transcurrido este tiempo, se escurre el marisco rápidamente y se pasa a una salmuera helada para cortar la cocción y disfrutar de unas gambas o langostinos jugosos y con aspecto brillante.

Gyozas de pollo

Si te gusta la comida asiática una buena idea para incluir en la mesa son las gyozas de pollo. También se conocen como empanadillas japonesas y son perfectas para servir como aperitivo en una cena con muchos invitados. Su preparación es muy sencilla y se pueden preparar tanto en casa como comprarlas precocinadas.

Para cocinarlas se pone el aceite de oliva y de sésamo en una sartén y se pocha la chalota y el puerro. Se añade la carne de pollo y el jengibre rayado y cocina a fuego medio-alto y, después, el cebollino y la salsa de soja. 

Una vez que el relleno está frío, hay que introducirlo en las obleas dejando espacio en los bordes para poder cerrarlas. En una sartén caliente, se añade un poco de aceite de oliva con las gyozas. Se cocinan durante dos minutos a fuego medio o hasta que se haga una base crujiente y en ese momento se añade medio vaso de agua y se tapa la sartén sin apagar el fuego. De este modo se cocinan al vapor manteniendo la base crujiente.

Pincho de bacalao en aceite

Si buscas la media naranja de esa botella de vino blanco que tienes guardada en casa, te recomendamos unos pintxos de bacalao en aceite. Se trata de una receta fácil y deliciosa, con la que podrás impresionar a las visitas.

Vas a necesitar unos lomos de bacalao, sin piel y desalado. No debería tener espinas, pero si las tiene, retíralas.

Corta los lomos en taquitos, asegúrate de que sean de bocado, lo suficientemente grandes para que no se deshagan. Para que sean unos pintxos, ensarta los taquitos de lomo en una brocheta

Llena el fondo de una sartén de aceite, y dora ajo picado con cayena. Lo importante es que el aceite se infusione con el sabor de estos dos ingredientes, por lo que es importante que no se te queme nada.

A continuación, vierte el aceite en las brochetas de bacalao. Para que esté más rico, te recomendamos que dejes reposar la mezcla durante horas, aunque puedes comerla al momento.