Rusia pone fin a las exportaciones de uranio a Estados Unidos en represalia a sus restricciones
El uranio natural es la materia prima para producir uranio enriquecido, cuyo proceso genera como residuo el uranio empobrecido. La importancia del uranio enriquecido resalta en la utilización principal de la fabricación de combustible destinado a centrales nucleares, por lo que la falta de este mineral pondría en serios problemas a cualquier potencia.
En un reciente comunicado del 15 de noviembre, el gobierno de Rusia anunció que ha decidido restringir temporalmente la mayor parte de las exportaciones de uranio enriquecido a Estados Unidos, en respuesta a las sanciones impuestas por Washington. Esta medida podría afectar significativamente la cadena de suministro de uranio en el país norteamericano.
¿Por qué Rusia restringió las exportaciones de uranio en Estados Unidos?
La decisión se produce en un contexto de tensiones crecientes entre ambas naciones, especialmente tras la invasión rusa de Ucrania. Hasta el año pasado, Estados Unidos dependía de Rusia para aproximadamente un tercio de su consumo total de uranio enriquecido, lo que subraya la importancia de este vínculo económico, a pesar de las sanciones en curso.
La Casa Blanca había implementado restricciones en mayo, permitiendo excepciones a la importación de uranio ruso solo si se demostraba la falta de fuentes alternativas viables o si las importaciones eran consideradas en el interés nacional. Sin embargo, la nueva medida de Rusia podría complicar aún más la situación, afectando las operaciones de las centrales nucleares en Estados Unidos.
Dependencia de Estados Unidos por el uranio ruso
La dependencia de Estados Unidos del uranio enriquecido ruso ha sido un tema de debate en el ámbito político y económico. A pesar de las sanciones y las tensiones diplomáticas, la necesidad de este recurso ha mantenido un vínculo económico entre ambas naciones. La dificultad de modificar una cadena de suministro tan compleja ha llevado a que las autoridades estadounidenses busquen alternativas, aunque estas no siempre sean viables a corto plazo.
La nueva normativa rusa también contempla excepciones puntuales, que deberán ser aprobadas por el Servicio Federal de Control Técnico y de Exportaciones. Esto sugiere que, a pesar de las restricciones, aún existe un margen para que algunas importaciones se realicen, siempre que se justifique adecuadamente su necesidad.