Un maratón a 20 grados bajo cero y en pleno corazón de la Antártida
Quieras que no, todos hemos terminado por salir a correr algún día bajo un frío que pela. Pocos, sin embargo, lo hemos hecho a 20 grados bajo cero, y mucho menos completando los siempre exigentes y extenuantes 42,195 kilómetros de un maratón. "Es la mejor experiencia que he tenido jamás al correr. La solitud de una carrera de fondo combinada con el precioso aislamiento del continente más solitario es algo de lo que muy pocos hemos podido disfrutar", cuenta Brett Karlson, un veterano maratoniano amateur sudafricano, sobre sus sensaciones.