El Gobierno ahora denunció la detención de un empleado de la embajada argentina en Caracas
Poco después de que el Gobierno exigiera la liberación del gendarme detenido por las fuerzas de Nicolás Maduro en Venezuela, desde Cancillería denunciaron ahora la detención "arbitraria e injustificada" de un empleado venezolano de la embajada argentina en Caracas.
En un comunicado, calificaron a la acción como "una violación flagrante e inaceptable de las normas internacionales que garantizan la inviolabilidad de las sedes diplomáticas y la protección de su personal, incluidos aquellos que desempeñan funciones esenciales".
"Esta detención no es un hecho aislado, sino parte de una campaña sostenida de hostigamiento, intimidación y violencia psicológica contra los asilados y empleados de la misión argentina", aseguraron.
La nueva advertencia del Gobierno sobre Venezuela y un llamado a la comunidad internacional
En el extenso escrito, también alertaron por "la presencia de francotiradores apostados frente a la sede" sumado a "la ocupación ilegal de las viviendas vecinas" para configurar "un cerco de facto con el claro objetivo de ejercer presión y generar un clima de terror sobre quienes se encuentran en el interior de la representación diplomática".
Por ese motivo, las autoridades argentinas exigieron "de forma categórica la liberación inmediata del empleado local" como también "la entrega de los salvoconductos" para las personas asiladas en la sede diplomática en Venezuela.
"Apelamos al Secretario General de las Naciones Unidas para que actúe con la urgencia y determinación que esta situación demanda. Es necesario garantizar la liberación del empleado local, la entrega de los salvoconductos y el fin del hostigamiento y el terror psicológico ejercido por el régimen de Nicolás Maduro contra la misión diplomática argentina y las personas bajo su resguardo. La pasividad o la demora en la acción solo contribuirán a agravar la situación", advirtieron.
Por último, la Argentina hizo un llamado urgente a la comunidad internacional para que se sume a este reclamo con la mayor firmeza posible.
"La liberación inmediata del empleado local y la entrega de los salvoconductos para las personas asiladas no admiten más espera. Las consecuencias de la inacción podrían ser irreparables", concluyó el ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.