Oro verde: el alimento con más proteínas vegetales que protege la vista y hace que no necesites más lentes
La vista es uno de nuestros sentidos más valiosos, pero también uno de los más amenazados por la exposición constante a las pantallas. Con el tiempo, los ojos pueden mostrar signos de deterioro, como pérdida de agudeza visual, cansancio o mayor vulnerabilidad a enfermedades oculares.
Una forma clave de proteger la salud ocular es mantener una alimentación saludable, rica en antioxidantes, vitaminas y minerales. Nutrientes esenciales como la luteína, la zeaxantina y el zinc son aliados importantes para proteger la salud de los ojos a lo largo de los años.
¿Cuál es el alimento con más proteínas vegetales que protege los ojos?
Además de ser un gran aliado en la cocina, las arvejas ofrecen una amplia variedad de propiedades nutricionales que brindan múltiples beneficios para la salud ocular.
Ricas en luteína y zeaxantina, dos carotenoides con potentes propiedades antioxidantes presentes en el pigmento de la mácula, las arvejas ayudan a proteger y mantener la salud de los ojos.
Además, son una excelente fuente de zinc, un mineral esencial para mantener la retina saludable y proteger los ojos de los daños causados por la luz. También son bajas en grasas saturadas y tienen un alto contenido de fibra, lo que las convierte en una opción saludable para el bienestar general.
Según un informe de la Universidad de Harvard, publicado en Harvard Health Publishing, se recomienda consumir arvejas al menos cuatro veces a la semana. El estudio señala que, por cada 100 gramos de arvejas, se ingieren 3.3 gramos de hierro, un mineral clave para la producción de hemoglobina y la prevención de la anemia.
Beneficios de las arvejas para la salud
Las arvejas son una excelente fuente de proteína vegetal, fibra, vitaminas del complejo B y A, y minerales como calcio, potasio e hierro. Además, contienen compuestos bioactivos como flavonoides y taninos, que les otorgan propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Gracias a su alto contenido en nutrientes esenciales, las arvejas no solo favorecen la salud ocular, sino que también ofrecen múltiples beneficios para el bienestar general:
- Mejoran la salud intestinal: las arvejas aportan fibras, principalmente insolubles, las cuales ayudan a acelerar el tránsito intestinal.
- Ayudan a regular el azúcar en sangre: la fibra y la proteína presentes en las arvejas retrasan la absorción de los carbohidratos simples a nivel intestinal y promueven la saciedad. Además, tienen un bajo índice glucémico, siendo una excelente opción para las personas que sufren diabetes.
- Aportan proteínas vegetales: son una excelente fuente de proteínas de origen vegetal, debido a que contiene aminoácidos esenciales para el organismo, como la lisina, leucina y fenilalanina y, en menor cantidad, metionina y treonina.
- Ayudan a bajar de peso: al ser ricas en fibras y proteínas de origen vegetal, ayudan a retardar la digestión y promover la sensación de saciedad.
- Previenen el envejecimiento prematuro: la vitamina A y los compuestos carotenoides presentes en las arvejas tienen propiedades antioxidantes, las cuales ayudan a cuidar la salud de la piel, disminuyendo el daño que causan los radicales libres a las células.
- Protegen el corazón: las arvejas, ricas en fibra, flavonoides y carotenoides, reducen el colesterol LDL y el riesgo de enfermedades cardíacas. También aportan magnesio, calcio y potasio, que ayudan a controlar la hipertensión.
- Previenen el cáncer: contienen carotenoides, flavonoides, catequinas y ácido cafeico, compuestos bioactivos con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, que previenen los daños celulares causados por los radicales libres.
¿Cómo sumar las arvejas a la dieta?
Esta legumbre es rica, nutritiva y muy versátil, fácil de sumar a diversas preparaciones y enriquecer la dieta. Existen diversas opciones y formas de incorporarla, algunas opciones son:
- Hummus.
- Ensaladas.
- Woks.
- Guisos.
- Hamburguesa.
¿Cómo se preparan las lentejas?
Debido a la presencia de ingredientes no digeribles, las arvejas no deben consumirse crudas. Por esta razón, es recomendable remojarlas durante al menos 8 horas, escurrirlas y hervirlas en agua con sal durante unos minutos, dependiendo el tamaño de las arvejas.
Este procedimiento es clave porque las legumbres crudas contienen una proteína llamada lectina, que puede ser perjudicial para la salud. Esta forma parte de un grupo de compuestos conocidos como antinutrientes, los cuales dificultan la correcta absorción de nutrientes presentes en los alimentos.