Un ministro advierte de que el ejército británico sería destruido en "seis meses" en caso de enfrentarse a Rusia
Los países occidentales continúan preparándose ante una posible escalada de los conflictos que en los últimos años han venido marcando la agenda internacional. Entre ellos, Reino Unido ha sido uno de los que más inciso ha hecho en la importancia de aumentar la inversión de su ejército y armamento.
Hace tan solo unos días, el jefe del Estado Mayor de Reino Unido, Sir Tony Radakin, advirtió de que el mundo se encontraba en el albor de una "tercera era nuclear", como resultado de la inestabilidad provocada por países como Rusia o Irán. Un horizonte, ante el que Radakin consideraba que era decisivo invertir en la renovación del armamento e industria nuclear británica, agregando que: "La disuasión del Reino Unido es la parte de nuestro inventario, de la que Rusia es más consciente y tiene más impacto sobre Putin que cualquier otra cosa".
En el mismo sentido se ha pronunciado el Coronel Alistair Carns. Carns ha llegado a firmar que el ejército de Reino Unido sería destruido entre "seis meses y un año", si tuviera que enfrentarse al ejército de Putin, haciéndose eco de las bajas que Rusia está sufriendo en el marco de la Guerra de Ucrania, y que estima que son de 1.500 soldados muertos o heridos diariamente.
Una mayor inversión en los reservistas
El medio 'SkyNews', se ha hecho eco de las palabras del actual secretario de Estado para Veteranos del Ministerio de Defensa de Reino Unido, durante una conferencia celebrada en el Royal United Services Institute (RUSI). Alistair Carns aseguró que "en una guerra de gran escala (...) similar a la de Ucrania, nuestro Ejército, por ejemplo, con las tasas de bajas actuales, se agotaría en un periodo de seis meses a un año".
El reservista quiso matizar sus palabras, agregando que "eso no significa que necesitemos un ejército mayor", pero sí defiende la importancia de reforzar el papel de los reservistas, a quienes considera "críticos" para aprovechar al máximo las capacidades del Ejército Británico en materia de defensa. De esta forma, Alistair Carns aboga por revitalizar este sector del ejército, aumentando la inversión en el mismo, y llevando a cabo una labor de difusión de cara a la ciudadanía: "Existe una necesidad en todo el gobierno de recordar a la gente que la libertad no es gratis", agregó.
Tras la Guerra Fría, las principales potencias europeas fueron reduciendo su presupuesto destinado a defensa, lo que por supuesto también tuvo un impacto directo en las fuerzas reservistas. Una situación que, como destaca Europa Press, ha llevado a que estas fuerzas no solo no sean lo suficiente extensas, sino que tampoco estén preparadas, o carezcan de equipamiento adecuado.