La Confederación del Ebro apunta a crecidas «poco por encima de lo ordinario» pero sin descartar «daños por desbordamiento»

La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha advertido de que se espera que continúe el «aumento importante» de los caudales de los afluentes de la margen izquierda del río Ebro en las provincias de Burgos y Álava (ríos Nela, Jerea, Omecillo, Bayas y Zadorra) y de Navarra (cuencas del Ega, Arga e Irati). En líneas generales, los máximos de caudal en las cabeceras de estos ríos se prevén para la madrugada de este domingo a lunes, mientras que en sus respectivos tramos medios y bajos lo harán entre el mediodía del lunes 9 de diciembre y la madrugada del martes 10 de diciembre. La CHE indica que «no se puede descartar que algunas de estas crecidas puedan tener carácter extraordinario, aunque de alta frecuencia, es decir, con umbrales poco por encima de lo ordinario, aunque lo suficiente como para provocar daños por desbordamiento«. El Ebro en Miranda podría alcanzar caudales del entorno de 400-600 m3/s entre la tarde del lunes y primeras horas del martes. El Ebro en Logroño, 800-1000 m3/s, y en el tramo de Castejón y Tudela, 1400-1800 m3/s, ambos en la mañana del martes. La entidad ha precisado que «parte de este pronóstico hidrológico está todavía basado en predicciones meteorológicas, de modo que el grado de incertidumbre todavía es elevado y conviene seguir atentamente la evolución del episodio«. Las temperaturas han comenzado a descender y, con ello, la cota de nieve, que desde media tarde del sábado 7 de diciembre se encuentra por debajo de los 1000 msnm.