Las grietas de un colegio de Fuente Palmera enfrentan al Ayuntamiento y el AMPA con la Junta de Andlaucía
0
La inquietud va a más. El Ayuntamiento de Fuente Palmera y la asociación de padres y madres (AMPA) del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Séneca , situado en el núcleo de población de Villalón , están alarmados por el estado de conservación del centro, en el que estudian en torno a treinta alumnos. La aparición de grietas tanto en la fachada del inmueble como en las aulas y las zonas de administración y comunes del edificio, que es una constante en al menos los últimos tres años, han provocado que ambas instancias se dirijan a la Delegación de Desarrollo Educativo y Formación Profesional para demandarle una solución urgente. Pero las posturas se encuentran encontradas: la Junta de Andalucía asegura que los daños no son estructurales, y que por lo tanto su arreglo corresponde al municipio —los ayuntamientos son los responsables de las labores de mantenimiento de los centros educativos—; el Consistorio y los progenitores de los estudiantes opinan lo contrario, esto es, que se trata de un problema de fondo, de estructura, y que entonces quien tiene que ponerse manos a la obra es la Administración autonómica . El alcalde de Fuente Palmera, Francisco Javier Ruiz Moro (IU) , apoya su posición en un informe geotécnico encargado por el Consistorio a la empresa Tecnisondeos, y que recibió a comienzos de este noviembre. El documento, consultado por este periódico, es claro en sus conclusiones. «En el edificio existente se observa la presencia de asientos diferenciales, grietas y fisuras, las cuales siguen una progresión el tiempo, de tal manera que el tamaño y numero de las mismas está creciendo de una manera preocupante», indica el texto. «También cabe destacar que el terreno base de la cimentación es un nivel expansivo produciéndose procesos de hinchamiento-desecación, por lo cual el contacto directo entre el agua y el terreno base de cimentación provoca procesos de hundimiento parcial por pérdida de capacidad portante, por la existencia de procesos de saturación de agua y por procesos de hinchamiento y desecación del suelo», añade. «El colegio está en una ladera y el edificio tiene corrimientos hacia abajo y hacia el lado», suscribe el regidor en este punto. El informe geotécnico le da la razón cuando reseña que «hay movimientos en la edificación, rotura de elementos de cimentación, descenso de la edificación, asiento del edificio, movimiento de las losas, de los acerados, roturas de redes de saneamiento, presencia de grietas, etcétera». Francisco Javier Ruiz Moro indica, además que «en los últimos tres años nos hemos gastado unos 45.000 euros en el Ayuntamiento en la reparación de las grietas, en reponer los azulejos caídos y arreglar los cristales, las ventanas y las rejas». Justamente sobre las grietas, el estudio geoténico citado resalta que «se extienden en la totalidad de la fachada, y en el interior de la edificación, diagonal y paralela al suelo, y se producen básicamente en forma diagonal, lo cual nos indica un constante movimiento del edificio debido a pérdida de capacidad portante del suelo». El informe propone como solución «un sistema de recalce de la cimentación mediante micropilotes o un sistema de inyecciones de cemento/resinas en el terreno para reforzar y consolidar la zona afectada». Fuentes oficiales de la Junta en Córdoba declararon a ABC que «la Agencia Pública Andaluza de Educación (APAE) se ratifica en su informe de septiembre de 2024: los daños no son estructurales ; la estructura no está afectada, no así los revestimientos, tabiquerías y azulejos. El origen del daño es geotécnico, del subsuelo, con afectación al edificio pero la estructura no está afectada». Estos mismos interlocutores recordaron que, según la Ley, «la conservación, el mantenimiento y la vigilancia de los edificios destinados a centros públicos de educación infantil, de educación primaria o de educación especial, corresponderán al municipio respectivo».