Incongruencia de Dina Boluarte: pide inclusión femenina pero en su Gobierno es aún una deuda pendiente
La paridad no es una característica de este Gobierno y así lo ha demostrado la presidenta Dina Boluarte, la primera mujer de toda la historia republicana que asume este cargo pero que no tiene interés por reducir las brechas de desigualdad de género a las que hace mención en un discurso artificial que intenta hacer creer a la gente mientras es opacada por la protesta ciudadana.
"Es imprescindible priorizar el empoderamiento económico de las mujeres a través de su inclusión en el mercado laboral y en todos los sectores económicos en general, y así avanzar hacia un crecimiento económico inclusivo y sostenible”, señaló en el marco del Foro APEC 2024.
Pero, ¿tienen concordancia sus palabras con la cantidad de lugares que asigna a las mujeres dentro del Poder Ejecutivo? Veamos. Dina Boluarte asume la presidencia un 7 de diciembre de 2022, y en estos casi dos años de su mandato han sido 57 los ministros que la han acompañado, siendo solo 17 del género femenino, lo cual no representa ni el 30%.
Consultamos con la abogada y ex candidata a la alcaldía de Cusco, Gabriela Paliza, acerca de cómo afecta la falta de representación femenina en el gabinete a la percepción de compromiso con la igualdad de género en el Gobierno y comentó que no basta con ser mujer para estar comprometida con los derechos de las mujeres.
"A pesar de tener una presidenta mujer, lo que ha hecho es tener una alianza con diversas organizaciones conservadoras y anti derechos, que más bien su principal agenda en materia de derechos de las mujeres es acabar con el lenguaje inclusivo, desaparecer el ministerio de la Mujer y acabar con la Educación Sexual Integral en un país en el que tenemos índices altos de violencia sexual", señaló.
Dina Boluarte nunca observó la norma de eliminación de paridad y alternancia
Con la ley de paridad y alternancia se había logrado la presencia de 47 mujeres en el Congreso de la República, de un total de 130, lo cual no representa ni el 50% pero en comparación de los años anteriores era un avance. En el pasado mes de mayo, los legisladores decidieron eliminar esta ley y la presidenta Dina Boluarte no observó la norma. En declaración exclusiva para La República, Chriss Rengifo, politóloga del programa Aurora del Ministerio de La Mujer, menciona que haber eliminar la paridad y alternancia representa un gran retroceso.
"La eliminación de la paridad y alternancia es, claramente, un gran retroceso para la igualdad de oportunidades y la participación política de las mujeres. Si en este gobierno evidenciamos una escasa presencia de congresistas mujeres, con la eliminación de esta ley, en las próximas elecciones enfrentaremos una gran desventaja que las instituciones deben abordar. Por ejemplo, fomentando políticas públicas que incentiven el liderazgo político femenino, especialmente en las regiones rurales y comunidades indígenas, y promoviendo el rol de las mujeres como líderes y agentes de empoderamiento, cada vez más fuertes en la sociedad y en la política", mencionó.
Es así que la ausencia de participación femenina en altos cargos responde también a factores estructurales, sociales pero también políticos que no promueven su presencia. Sofía Carrillo, comunicadora afroperuana y activista, cree que es necesaria la inclusión de las mujeres para reducir la brecha de desigualdad.
"Cuando no Incluyes a las mujeres están diciendo que sus vidas y perspectivas no son relevantes ,lo que es un mensaje muy peligroso, porque afianzan las desigualdades que las afecta. Aunque creo que una política de igualdad de género es insuficiente sino se interseccionan enfoques de derechos humanos e intercultural , es necesario generar ambientes sostenibles que fomenten, acompañen y garanticen esa participación", acotó.
Por todo esto, llama la atención el doble discurso que presenta la mandataria al exigir inclusión pero no fomentarla y debe ser abordado con urgencia a nivel del Estado con políticas que realmente garanticen la igualdad para fortalecer la presencia femenina.