César Santafé, el renacer de un trascendente pintor

El maestro César Santafé (Cali, 1954-2019) se formó en la tradición universal de la pintura y de las vivencias de los hombres y mujeres de nuestra Tierra. Se trata de uno de los pintores colombianos que mayor renombre está alcanzando actualmente, tanto en su país de origen como en España, donde su obra se va conociendo cada vez con mayor interés. Ejemplo de ello reside en una nueva exposición, ubicada en la Fundación Pons de Madrid, y que estará disponible hasta este viernes 8 de noviembre. "Preludio. El renacer de un pintor" es el título de esta exhibición, que cuenta con 40 dibujos y bocetos creados por Santafé. Una muestra que, prometen desde la citada Fundación, funciona como "antesala de futuras exposiciones y circuitos en Europa" de la obra pictórica y creativa del maestro colombiano.

César Santafé encontró su vocación en un viaje a España en 1971, momento en el que la pintura se convirtió en su razón de ser. Cataluña, su hogar adoptivo, vio florecer su estilo expresionista, desafiando la realidad con pinceladas anti realistas. Su vida se entrelazó con la docencia, la escultura, el dibujo y la pintura, dejando un legado artístico marcado por la pasión y su rebeldía creativa en Santiago de Cali.

Fue un artista para el que la figura humana era protagonista, desplegándola en un espacio plástico, en diversidad de estructuras compositivas, en dibujos a lápiz y tinta china como en la pintura al óleo, técnica que recogió de la tradición renacentista y sobre la que afirmó: “Por medio del óleo descubro cosas del mundo que no logro con la técnica del acrílico que posee colores fluidos y cendales”. Cuando Santafé creaba figuras humanas, contaba con objetos, con animales, produciendo, mediante un lenguaje pictórico, símbolos, texturas, brillos que hacen que la obra se desligue de la referencia inmediata a lo representado y permita evocar recuerdos y emociones.

Santafé ha hecho del dibujo y de la pintura al óleo su forma de expresión plástica; desde las miradas y la soledad del ser humano, se acerca a la representación de la música con sus músicos y bailarines y, buscando en su imaginario infantil, construye la familia del circo, pero antes de su cubismo cinético se interesa en el sentido y significado de lo trágico de la condición humana expresada a través de la temática de los mitos y la caída.

Después de su jubilación en el año 2016, continuó pintando, todos los días, con la disciplina que siempre lo caracterizó hasta el día de su muerte el 30 de marzo del año 2019, construyendo bocetos que la memoria le ayuda a poner sobre lienzo, y en esa tarea buscó afianzar su teoría del color, descubriendo otros elementos técnicos que le permitieron resolver la armonía polícroma de su paleta.