Optimismo inversor impulsó ganancias de hasta 32% en dólares en acciones
Octubre fue un gran mes para el mercado bursátil local. El optimismo de los inversores, sostenido principalmente por la disciplina fiscal del presidente Javier Milei, el respaldo del Congreso al veto de ley de financiamiento universitario y, sobre todo, la buena adhesión al blanqueo, impulsó ganancias de hasta 32% en los activos en dólares.
Las mayores subas de acciones se concentraron en los bancos y energéticas. Por el lado bancario, puede explicarse a partir del aumento de los depósitos y préstamos como consecuencia del blanqueo, lo que genera expectativas sobre una redefinición del rol de estas empresas, de acuerdo con Lisandro Meroi, analista de TSA Bursátil.
Por el lado del sector energético, Meroi afirma que para los inversores siguen ganando relevancia las posibilidades de explotación de hidrocarburos en Vaca Muerta. Esto se mantiene como el principal driver para las acciones de las empresas del sector y se refleja en los balances trimestrales, muchas veces con cifras superiores a lo esperado por el mercado.
Fuertes ganancias
Los mayores repuntes de octubre se registraron en la renta variable. Las subas de hasta 32% acumuladas en los ADR argentinos en Nueva York fueron encabezadas por los sectores bancario y energético, con papeles como los de BBVA, Edenor, Galicia, Supervielle, TGS y Macro. La única que no se sumó al rally fue Ternium, que perdió 8%.
El rally de la renta variable también se dio en Buenos Aires. El índice S&P Merval acumuló un alza de 18% medido en dólares al tipo de cambio contado con liquidación (CCL) y superó los u$s 1600, por lo que quedó muy cerca del máximo histórico de u$s 1800 que se registró a principios de 2018, durante el gobierno de Mauricio Macri.
La renta fija en dólares no se quedó atrás. El optimismo de los inversores le dio impulso a la demanda de bonos soberanos en dólares, segmento en el que se acumularon ganancias de entre 11% y 16% en los últimos treinta días, liderados por los Globales de los tramos medios de la curva de vencimiento (2035 y 2038).
La mejora de los títulos de deuda tuvo su correlato en los niveles de riesgo país. La tasa de riesgo argentino perforó los 1000 puntos básicos, algo no visto desde las PASO de 2019, previo al derrumbe financiero que se dio tras el triunfo electoral de Alberto Fernández y Cristina Kirchner. En octubre, el índice acumuló un descenso de 306 puntos básicos.
El buen clima financiero fortaleció aún más al peso. Las cotizaciones financieras del dólar cedieron hasta 7%, en el medio de los fuertes ingresos de divisas al sistema bancario para el blanqueo y abultadas liquidaciones de dólares del sector agroexportador (el 20% ingresa vía CCL y ayuda a contenerlo), a pesar de la baja estacionalidad del mes.