La Guardia Civil detiene a más de 30 personas en una macro operación internacional de fraude alimentario

La Guardia Civil ha arrestado o investiga a unas 50 personas por presuntos delitos contra la propiedad industrial, estafa, fraude alimentario, falsificación documental y contra la salud pública. En el marco de la operación OPSON XIII contra el fraude alimentario, la Guardia Civil ha arrestado a 32 personas en España, e investiga a otras 21.

Se trata de una macro operación que involucra a los cuerpos y fuerzas de seguridad de varios países de Europa, centrada en acciones específicas sobre alimentos y bebidas alcohólicas falsificados —o de calidad inferior a la que se supone que deben de tener— cadenas de suministro de alimentos ilegales, fraudes alimentarios, seguridad alimentaria y adulteración de productos motivada económicamente.

Las fuerzas de seguridad europeas describen un aumento de este tipo de prácticas ilegales en muchos países europeos, en las que los delincuentes se alían venden productos caducados o falsificados con la ayuda de algunas empresas de eliminación de residuos. Estas alteran las fechas de vencimiento de los alimentos caducados, como, por ejemplo, del aceite de oliva y de vinos con denominación de origen protegida. Los productos se “re-etiquetan” con nuevas fechas y se reintroducen en el mercado, poniendo en circulación alimentos posiblemente dañinos para la salud.

En Europa, según informa la Guardia Civil, se han incautado hasta el momento 22.000 toneladas de productos ilícitos y 850.000 litros de bebidas, en su mayoría alcohólicas. En total se han retirado del mercado bienes valorados en más de 91 millones de euros.

El instituto armado español explica que, en total, sus agentes han realizado más de 3.000 inspecciones y registros en centros de distribución, almacenes, medios de transporte, puertos y aeropuertos de toda España, en los que se ha detectado hasta 2.200 infracciones administrativas.

En La Rioja, por ejemplo, la Policía Judicial española, junto a la Europol y a los Carabinieri italianos, incautó 120.000 botes de atún y 45.000 litros de aceite en una empresa de la localidad de Alfaro. Detuvo a cuatro personas por vender atún y aceite de poca calidad con un etiquetado falso.

En el municipio madrileño de Valdemoro el SEPRONA confiscó y destruyó 642 garrafas de aceite, 104 jamones y 207 quesos en mal estado. Se detuvo a una persona y cuatro permanecen investigadas por comercializar con jamones y quesos sin trazabilidad, y por hacer pasar por aceite de oliva virgen extra (AOVE) las garrafas de aceite de semillas.

También en Andalucía y La Comunitat Valenciana ha habido acciones de OPSON XIII. En València, por ejemplo, el SEPRONA inmovilizó 80.000 kg de encurtidos de una empresa que añadía colorantes y conservantes no autorizados a los alimentos. El gerente ha sido detenido por delitos contra la salud pública.