Real Madrid - Barcelona: El día más difícil para la valiente apuesta de Flick

«Yo sí he estado en el Bernabéu, como jugador, hace muchos años», recordó Flick. Concretamente fue en los cuartos de la Copa de Europa de 1988, cuando era centrocampista del Bayern. Su equipo perdió 2-0 y quedó eliminado en la famosa eliminatoria en la que el Real Madrid pasó en el encuentro de ida, en un Múnich nevado, de un 3-0 a un 3-2 en los minutos finales, con los goles de Butragueño y Hugo Sánchez. La respuesta del entrenador alemán vino seguida de un «no pasó nada extraño», porque la pregunta había sido sobre árbitros. No quiere entrar ahí el preparador del Barcelona. «No es mi trabajo hablar de ellos, mi trabajo es centrarme en el rendimiento», afirma antes del que sí será su primer Clásico, y su primera visita al Bernabéu como entrenador.

"Es nuestra filosofía"

Ese rendimiento del que habla está siendo muy alto hasta hora. La última gran prueba, la del Bayern en la Champions, la superó, aunque durante muchos minutos el equipo alemán le sometió y le superó en el juego. «Nos precipitamos dando el último pase», analizó Kane la derrota de los suyos por 4-1. El Bayern consiguió sortear la presión extrema por la que apuesta el Barcelona, y entonces aparecieron los espacios a la espalda de la defensa adelantada, aunque no los aprovecharon durante esos buenos momentos. Sí llegaron a empatar, y entonces Flick destaca que su equipo supo dar un paso adelante e igualar las fuerzas. «Es nuestra filosofía, presionar al máximo. Tenemos mucha calidad con y sin balón. Debemos ser una unidad compacta, esto es importantísimo, porque si dejamos espacios no es bueno.

Contra Mbappé y Vinicius

En la segunda parte contra el Bayern lo hicimos bien. Nos vamos a concentrar en esto», reconoció Flick, dispuesto a no cambiar de idea pese a que enfrente está el Real Madrid, un desafío todavía mayor porque el conjunto de Ancelotti cuenta con Vinicius, de los mejores del mundo a campo abierto, el lunes nuevo Balón de Oro si no hay sorpresas, y con Mbappé, que pueden explotar ese territorio. «Siempre hay jugadores rápidos en los equipos rivales, ahora jugamos contra el Madrid, evidentemente todos sus futbolistas están muy preparados, pero confío y creo en mi equipo», continuó.

Al límite

El Barça de Flick vive al límite. Hace unas semanas salió la estadística de las veces que deja en fuera de juego a los rivales, y doblaba al siguiente en las ligas europeas. Al Bayern se le anuló un gol por fuera de juego. En la última jornada, al Sevilla, un gol y un penalti, y en la anterior, dos tantos al Alavés. Siempre por poco, pero está el VAR para esas acciones. La otra pieza fundamental para que esta filosofía tenga éxito es que la defensa empiece por los delanteros, de ahí que Flick pida un esfuerzo extra a futbolistas como Lamine: «Con la pelota ya estáis viendo lo que puede hacer, pero para nosotros también es importante que pueda mejorar en defensa, y lo está haciendo bien».