Argentina salva un punto en la "laguna" de Maturín con Messi intermitente
Argentina rescató un trabajoso punto de su visita a Venezuela, un empate 1-1 sobre el anegado campo de juego del Monumental de Maturín, que se convirtió en símbolo de una compleja excursión de los campeones del mundo en la novena fecha de la clasificatoria sudamericana al Mundial 2026.
Esta vez, la Albiceleste debió trajinar sobre un terreno cargado de agua que obligó a cambiar los planes y a tratar de adaptarse a un escenario con menos traslado y pases que en otras ocasiones, y a sufrir con los envíos de la Vinotinto, que finalmente encontró la igualdad en un impecable cabezazo de Salomón Rondón.
En estas condiciones, a lo que se sumaron las ausencias de varios titulares entre suspensiones y lesiones, Argentina estuvo lejos de lucirse, y en más de una ocasión debió encomendarse a la seguridad de Gerónimo Rulli, el portero titular que reemplazó al sancionado Emiliano 'Dibu' Martínez.
La del arquero de Aston Villa fue una de las numerosas bajas albicelestes, además de Nicolás González, Alexis Mac Allister, Alejandro Garnacho y Cristian 'Cuti' Romero.
El terreno pasado por agua también desfavoreció el regreso de Lionel Messi al bicampeón de América después de tres meses, recuperado de una lesión, pero sin poder brillar en un escenario en el que, a su vez, Venezuela se ha mostrado sólido en lo que va de esta eliminatoria, a tal punto que aún mantiene el invicto en su casa.
El entrenador Lionel Scaloni se mostró muy molesto por la decisión de jugar a pesar de que el campo no estaba pleno, y expresó que "lectura hay una sola, y es que el partido no reunía las condiciones para jugarse, al menos hoy. Después, la decisión la tomó el árbitro y ya está. No quiero hablar mucho más, pero no se podía jugar".
Ahora Bolivia
También Messi se quejó de las condiciones y evaluó que "el partido se hace trabado, muy feo. No pudimos dar dos pases seguidos. La cancha no ayudó para hacer lo que nosotros queremos hacer. Tuvimos que hacer otro partido que no habíamos preparado, pero hicimos el partido que había que hacer con esta cancha".
La igualdad no le cambió mucho los números a Argentina, que manda todavía en solitario en la clasificatoria, a pesar de que no ganó sus últimos dos cotejos, y que recién llega ahora a la mitad del recorrido a la próxima Copa del Mundo.
Con un equipo semialternativo, con siete cambios respecto del que perdió con Colombia en Barranquilla, Argentina se llevó al menos un punto de un viaje adverso, complicado desde el inicio por un conflicto diplomático, la dificultad para trasladarse desde Miami por el paso del huracán Milton y, al fin, un rival nada fácil que también le impuso condiciones.
En este contexto, el campeón del mundo intentará resarcirse el martes próximo, cuando reciba en Buenos Aires a una Bolivia revitalizada, que bajará al llano con buen ánimo luego de tres victorias en fila.
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