¿México fue el ‘ganón’? Nvidia fue ‘rechazada’ por la empresa Impax: ‘Subestimamos su potencial’
Cuando Nvidia se convirtió en el blanco de una fuerte liquidación a principios de este año, Impax Asset Management aprovechó silenciosamente el momento para aumentar una participación que hacía tiempo que lamentaba no tener.
Ian Simm, director ejecutivo y fundador del gestor de activos con sede en Londres de 50 mil millones de dólares, dice que él y su equipo habían estado buscando una oportunidad para corregir una decisión equivocada hace unos años, lo que significaba perderse el sorprendente repunte del 800 por ciento de Nvidia desde principios de 2023.
“Simplemente, subestimamos el potencial de mercado de su producto”, dijo Simm en una entrevista. Impax había estado buscando una forma de entrar, pero Nvidia “era cara”. Es decir, “hasta que hubo una liquidación”.
La caída del precio de las acciones de Nvidia a principios de este año dio como resultado una caída de su valor de mercado de cerca de un billón de dólares.
¿Cuáles son los factores que ocasionaron problemas en Nvidia?
Aunque gran parte de esa cantidad ya se ha recuperado, Simm dice que cree que la valoración actual de la empresa de más de 3.2 billones de dólares aún subestima su valor real.
Impax, fundada en 1998, se ha ganado un nombre como gigante entre los gestores de activos centrados en la transición hacia una economía más sostenible.
Simm afirma que ese objetivo debería ser compatible con la obtención de beneficios para sus clientes, pero ha sido difícil venderlo últimamente.
En los últimos dos años, un aumento de las tasas de interés, una crisis energética y el ascenso de los llamados Siete Magníficos de los gigantes tecnológicos han convertido la inversión ecológica en una apuesta perdedora.
El precio de las acciones de Impax ha caído casi un 30 por ciento este año, mientras que el S&P Global Clean Energy Index ha perdido más del 10 por ciento. Mientras tanto, el S&P 500 ha subido más del 20 por ciento en el mismo período.
Impax informó recientemente resultados que mostraron ganancias en acciones cotizadas de 6 mil 900 millones de dólares para el año fiscal, que finalizó el 30 de septiembre. Esa cifra fue inferior a los £5.800 millones de salidas netas que Impax vio en el período.
Simm afirma que hace unos años hubo un “gran debate” en Impax sobre las ventajas de invertir en Nvidia.
El caso de la inteligencia artificial era “especulativo en ese momento”, dijo. En aquel entonces, el gestor de activos concluyó que la tecnología de Nvidia se limitaba en gran medida a la industria de los videojuegos y, por lo tanto, decidió no invertir a lo grande.
“Francamente, hemos tenido un rendimiento inferior durante los últimos dos años en nuestras estrategias principales porque hemos apostado más por el crecimiento a un precio razonable, manteniéndonos alejados del impulso y la publicidad en torno a la inversión en tecnología de gran capitalización”, dijo.
Como el precio de las acciones de Nvidia estaba cayendo en junio, Impax triplicó su participación en la compañía a 4.9 millones de acciones a finales de mes desde 1.4 millones de acciones al final del primer trimestre, según datos compilados por Bloomberg y confirmados por Impax.
Auge de la IA impulsará la demanda de chips
Simm dice que Impax todavía considera que Nvidia está infravalorada, teniendo en cuenta que se espera que el auge de la inteligencia artificial impulse la demanda de sus chips.
Simm afirma que la compra de acciones de Nvidia, que al igual que otros gigantes tecnológicos necesita consumir grandes cantidades de energía para impulsar su crecimiento, también tiene sentido desde una perspectiva climática. A medida que la demanda de energía siga aumentando, Nvidia y otras empresas que desarrollen modelos más eficientes serán mejores para el medio ambiente, afirma.
Los chips Blackwell de Nvidia, que están empezando a distribuirse a los clientes este año, necesitarían 3 gigavatios de energía para desarrollar el software GPT-4 de OpenAI, dijo la compañía en un evento a principios de este mes. Hace diez años, ese proceso habría requerido 5 mil 500 gigavatios, dijo el fabricante de chips.
“La capacidad de Nvidia para ofrecer ahorros de energía la hace aún más valiosa”, afirmó Simm. Nvidia está emitiendo gases de efecto invernadero a un ritmo que supera los niveles necesarios para limitar el calentamiento global al umbral crítico de 1.5 °C.
En abril, los analistas de Morningstar estimaron que el aumento de temperatura implícito de la empresa era de 3.8 °C.
“Se puede ganar dinero invirtiendo en la respuesta de la sociedad a las emisiones excesivas de CO2 y al mismo tiempo ser pesimista sobre cuál será el resultado neto”, afirmó Simm.
Impax busca “crecimiento a un precio razonable en lugar de desde una perspectiva ética o el impacto no financiero”. Superar los umbrales del acuerdo climático de París es “una cuestión de riesgo”.
Pero “la fijación de precios debería resolver ese problema, si los países avanzan en la internalización del costo de las emisiones de CO2″, dijo.
Impax tiene acciones de Nvidia en cinco estrategias y fondos. Entre ellas, su cartera Global Opportunities, que está limitada a 40 acciones y está formada por empresas que tienen un modelo de negocio diversificado, operan en mercados de alto crecimiento y están “en desgracia por alguna razón”, dijo Simm.
Microsoft está incluida porque Impax cree que está infravalorada “en el contexto de la tendencia secular hacia una mayor inteligencia artificial”, dijo.
De hecho, “todo el sector industrial” parece ahora infravalorado, dijo Simm. Eso puede cambiar, ya que parece cada vez más probable un “aterrizaje suave en Estados Unidos”, lo que está ayudando a restablecer la confianza, dijo. El costo del capital está cayendo y la confianza del consumidor se está estabilizando, por lo que la renta variable “parece más atractiva”.