Episcopado condena muerte de migrantes en Chiapas y acusa "uso desproporcionado de la fuerza"
La Conferencia Episcopado Mexicano aseguro que el uso desproporcionado de la fuerza letal, por parte de agentes del Estado y que provocó la muerte de seis migrantes, no es un hecho aislado, “la consecuencia de la militarización de la política migratoria y una mayor presencia de las fuerzas armadas en la frontera sur”.A través de un documento, la Dimensión Episcopal de la Pastoral de Movilidad Humana, perteneciente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, rechazó el uso desproporcionado de la fuerza por parte de militares que dejó 6 migrantes muertos y 10 más heridos.Resaltaron que el Estado mexicano está obligado a hacer una investigación seria, imparcial y efectiva, debido a que por la naturaleza de los hechos y al existir un “contexto de violación sistemática de derechos humanos, así como una política migratoria basada en la militarización”.Sentenciaron que si este caso no es investigado con la debida diligencia “resultaría de algún modo, auxiliados por el poder público comprometiendola responsabilidad internacional del Estado mexicano”.Los obispos de México solicitaron el Estado mexicano adoptar medidas de repetición, asimismo, limitar la presencia de las fuerzas armadas en las labores de orden público y en materia de control y revisión migratorio en situaciones excepcionales “asegurar el cumplimiento de medidas preventivas en el uso de la fuerza”.Los obispos de México recordaron lo expresado por el Papa Benedicto XVI: "El principio de la centralidad de la persona humana nos obliga a anteponer siempre la seguridad personal a la Nacional.Por tanto, es necesario formaradecuadamente al personal encargado del control en las fronteras”.La cúpula del catolicismo mexicano se solidarizó con personas migrantes que fallecieron y resultaron heridas en el operativo del ejército mexicano, por lo cual extendieron sus oraciones, Expresaron que en nombre de la dignidad fundamental de cada persona, “es necesario esforzarse para preferir soluciones que sean alternativas a la contención de las personas en situación migratoria irregular que entran en el territorio nacional y la militarización de la frontera”.“Que el Dios que camina con las personas migrantes y refugiadas, lleve el consuelo y lapaz y el pronto alivio a las familias de las víctimas.Como Iglesia que acompaña siempre a los más pobres, confiamos que la violencianunca será la solución”, señalaron.Éste comunicado se da luego de qué la Conferencia Episcopado Mexicano, la compañía de Jesús y diversos entes de el catolicismo mexicano, refrendaran los puntos tocados por ” el diálogo por la paz”, en el cual le pedían a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo no dejar de lado las labores migratorias y de restauración del tejido social, las cuales ayudarían a lograr la paz tan anhelada en todo el país.rarr