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Октябрь
2024

Tres rutas de senderismo en Castellón que son perfectas para hacer en otoño

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Además de ser un auténtico paraíso natural, histórico y cultural, Castellón es ideal para las personas amantes del senderismo

Una ruta de senderismo que atraviesa un bosque milenario perfecta para una escapada en otoño

Dentro de la Comunitat Valenciana, Castellón es la provincia que cuenta con los espacios naturales más intactos, tanto desde el punto de vista natural como del patrimonio cultural. La Costa del Azahar que la baña es conocida como la hermana pequeña del litoral levantino y su nombre se debe a la flor del naranjo ya que este cítrico se lleva cultivando en esta tierra desde el siglo XVIII.

Pero no olvidemos que Castellón cuenta tanto con el mar como con la montaña: si hablamos de espacios protegidos, nos encontramos con siete parques naturales dentro de sus límites geográficos, donde es posible reconectar con la naturaleza.

Además de ser un auténtico paraíso natural, histórico y cultural, Castellón es ideal para las personas amantes del senderismo. Hemos seleccionado tres rutas en este artículo, ideales para recorrer durante el otoño al refrescar las temperaturas y contar con un paisaje y unos atardeceres que juegan con los colores de la temporada.

La Vía Verde del Mar (Benicàssim-Oropesa)

Se trata de uno de los senderos más apreciados en Castellón, la Vía Verde del Mar, una ruta que un Benicàssim y Oropesa del Mar y que permite contemplar cómo la sierra de Oropesa se abre al mar. Es una de las vías verdes más extraordinarias de la Comunitat Valenciana.

Con el objetivo puesto en Oropesa del Mar con esta ruta se recorre esta parte más desconocida de la Costa del Azahar al adentrarse por esta vía, paralela a la orilla del mar, que se comenzó a usar en 2009 aprovechando el trazado de la antigua línea ferroviaria. En el itinerario se atraviesan zonas de gran valor medioambiental, por encima de pequeñas calas, donde el salitre se mezcla con el olor del pino mediterráneo.

Los seis kilómetros de la ruta se pueden recorrer a pie o en bici. El kilómetro 0 de esta ruta se encuentra en Benicàssim, específicamente, en el área de descanso que se encuentra junto al antiguo apeadero de las Villas.

Este pueblo castellonense es conocido por su famoso festival y por sus cinco increíbles playas. También conocido es el paseo de las Villas, un barrio levantado sobre 51 casas señoriales de la alta sociedad de principios del siglo XX. Se dice que Hemingway vivió aquí.

También se puede comenzar la ruta desde Oropesa del Mar; el acceso al inicio se localiza en el punto medio del paseo marítimo que perfila la Playa de la Concha.

Oropesa del Mar es un destino eminentemente playero, muy familiar, y su cercanía a la Reserva Marina de las Islas Columbretes permite tener un extra. El puerto de Oropesa, además, es un lugar idóneo al que acudir para encontrar aventura. Se puede practicar esnórquel e incluso realizar inmersiones nocturnas en este minúsculo archipiélago volcánico, entre impresionantes corales rojos y peces de colores.

A lo largo del sendero de la Vía Verde se recorren paisajes de un gran valor cultural y patrimonial, como el puente metálico, las torres vigía de Colomera o La Corda, las playas y calas de la zona, sus acantilados, los llanos de Bellver o el barranco de la Dona.

Sendero Familiar de Montanejos

La localidad castellonense de Montanejos, en la comarca del Alto Mijares, es conocida, sobre todo, por sus aguas termales. Lo primero que habría que destacar es su Cueva Negra, donde aparecieron los primeros pobladores en el neolítico, interesados en este emplazamiento junto al río Mijares. Después, los pobladores árabes que dieron forma a las calles del casco antiguo y al castillo o la antigua alquería o asentamiento árabe y los baños de esa época.

Este municipio nos ofrece paisajes singulares marcados por dos cursos de agua: el río Mijares y el Barranco de la Maimona, que se encajan entre impresionantes paredes, aprovechadas también por numerosos escaladores. De hecho, en una de las localidades más importantes de España para practicar esta actividad.

La ruta que ofrece parajes de extraordinaria belleza está configurada por el río y tiene 18,78 kilómetros. La senda de los Estrechos y de la Cueva Negra es una ruta circular que impacta ante la belleza inesperada de los estrechos y paredes verticales. Además en su trazado incluye el famoso Chorro de Montanejos, un aliviadero en el embalse de Arenós. 

La Fuente de los Baños de Montanejos es una parada obligatoria dentro de esta ruta fluvial, que parte desde el propio pueblo y permite ver las villas modernistas al comienzo para llegar a este conjunto de fuentes termales. 

En el caso de que resulte un poco larga, el Ayuntamiento de Montanejos ha señalizado la Senda de los Estrechos del río Mijares, con una duración de tres horas y 8,6 kilómetros de recorrido.

Además del senderismo y la escalada, también se pueden practicar en Montanejos otras actividades deportivas como el barranquismo, rafting y kayak.

Ruta al río Chico y Pozo Negro de Fuentes de Ayódar

Es una ruta recomendada para todos los públicos y cuenta con 7 kilómetros. Fuentes de Ayódar, también en la comarca del Alto Mijares, se encuentra enclavado en los contrafuertes septentrionales del Parque Natural de la Sierra del Espadán, a 505 metros de altitud.

El río Chico bordea el pueblo creando zonas de piscinas naturales aptas para el baño, y las laderas de sus montañas están cubiertas de alcornoques, pinos, encinas y plantas aromáticas con mucha presencia del romero. El río es una de las maravillas naturales del municipio por donde transcurrirá la ruta hasta el Pozo Negro, su mayor y más conocido atractivo.

Entre pinos y alcornoques se llega hasta la orilla del río, en la Fuente del Zuro y de ahí, por una senda que discurre bordeando el cauce, se alcanza el Pozo Negro, una poza de gran belleza formada por la erosión del agua sobre las areniscas. Esta piscina natural cuenta con una profundidad máxima de unos tres metros.

Aparte de la belleza del paraje, también podemos disfrutar en esta localidad castellonense el Museo Etnológico, situado en un antiguo pajar a las afueras; el molí de Dalt del siglo XV, se encuentra al lado de la balsa de riego y El Lagar del Cubo, prensa donde antiguamente pisaban la uva para la obtención del vino.