La 'reina de Bulgaria', una soltera muy lanzada, provoca la espantada de su cita: «No estoy a su misma altura»

Milena (44) se presentó en 'First Dates ' con una idea fija: ella saldría de allí de la mano de su futuro marido. Y así tal cual se lo dijo a su pretendiente, quien consideró que igual la mujer iba demasiado rápida para una primera cita. Una velada que prometía se estropeó por un comentario. La 'reina de Bulgaria', apodo que recibió de un ex novio, llegó al restaurante de citas de Cuatro contando que reside en España desde hace 23 años, «haciendo feliz a la gente» como guía turística, un trabajo que le encanta. «Soy una persona muy extrovertida, con don de gentes, con carisma y que sabe transmitir emociones», aseguró en su presentación en el espacio conducido por Carlos Sobera . Preguntada también por su prototipo ideal, Milena explicó que «busco que sea buena persona, noble, transparente, que se cuide y que haya pasión y mucha química». «Me voy a casar en mi país y aquí, y me caso en todos lados, de blanco y con trajes búlgaros y bailando por todas partes», añadió, para que quedara claro. La soltera conocía momentos después a David (46) un camarero barcelonés cuya principal afición es el gimnasio, un lugar que es para él como un parque de atracciones, «me lo paso bomba». Primera coincidencia con Milena : ella también resultó ser una apasionada del deporte. Además, físicamente se atrajeron bastante. «Es muy risueña, me gusta. Desprende mucha energía», señaló él, esperanzado de poder conocer a alguien que le gustase tras una ruptura. «No hace tanto tuve una relación y el final fue doloroso y estoy aquí porque no me he querido aislar del amor». Ella, por su parte, comentaba encantada que «me encanta este chico, es muy guapo». Una vez sentados en la mesa, los solteros compartieron gustos y aficiones y la cosa fluía. Hasta que Milena se lanzó a confesarle a su cita sus intenciones. Cuando David le preguntó a su cita si estaba buscando al amor de su vida igual que él, se notó que no se esperaba para nada la respuesta de ella. «¿Sabes lo que le he dicho a todo el mundo que he conocido? Que hoy voy a salir con mi futuro marido. Todo el mundo se reía», soltaba la soltera, un comentario que ponía al catalán visiblemente incómodo. «Podría ser», daba por réplica con nerviosismo. A raíz de ahí, la velada daba un giro y el soltero acababa admitiendo que la búlgara no era la persona que lo ayudaría a superar a su ex. «Venía con la esperanza de que ocurriera algo mágico y lo otro desapareciera, pero no ha sido así. Milena es una chica atractiva y guapa, pero no es mi perfil de chica porque me gustan más delgaditas y bajitas. Me sabe fatal porque la chica es encantadora, pero no estoy a su misma altura», se sinceraba ante las cámaras. Toda una sorpresa, pues en la intimidad del reservado parecían derrochar complicidad. La más impactada por las calabaza de David en la decisión final fue la propia Milena, que ya se veía pasando por el altar con él después del rotundo «sí, sin dudarlo» que contestó a la clásica pregunta del programa de «¿quieres tener una segunda cita?». «No estamos en el mismo momento. Hace unos meses salí de una relación y fue muy doloroso. Todavía tengo idealizada a esa persona y me va a costar, tengo que trabajar esa parte», aclaraba el soltero para minimizar el impacto de su rechazo. Pero Milena no pudo disimular la desilusión que le causó.