Ralphie Choo, Mushkaa y Julieta: cumpleaños total para el Festival·B

Diez años de vida, dos almas con el Fòrum como bisagra y la música como razón de ser. O, mejor dicho, como única razón de ser. El viernes, chaparrón de guitarras y canciones hechas a mano. El sábado, oreja pegada al asfalto para auscultar los nuevos sonidos urbanos. De Él Mató a un Policía Motorizado a Mushkaa y de Guillem Gisbert a un Ralphie Choo recién salido de su estelar colaboración con Rosalía. El Festival·B, antiguo Cara B, llega a su décimo aniversario y lo celebra exhibiendo personalidad propia, fidelidad a sus principios fundacionales y mapeo de «las nuevas sensibilidades creativas que conviven y se retroalimentan de manera orgánica y natural», ya sea rock, folk, pop, electrónica o reguetón. En el cartel, protagonismo estelar de Julieta, La Zowi , Maria Hein, Cupido y Melenas, y un nuevo escenario de música electrónica como ventana al futuro. «Alejado de grandes conglomerados, han sido 10 años de crecimiento sin renunciar a una esencia autónoma y autosuficiente que le permite trazar las coordenadas de la música y las tendencias más urgentes en diferentes ámbitos», celebran desde una cita que, cierre más o menos oficial del verano musical barcelonés, llega este viernes a su primera década de vida convertida en alternativa preotoñal a los festivales clónicos de cada verano. También aquí, es cierto, se repiten nombres que han causado sensación durante la temporada estival (el tándem Julieta y Mushkaa; el impetuoso Ralphie Choo, que ya venía apurando el impacto del asombroso 'Supernova'), pero si algo busca el Festival·B es consolidarse como puente intergeneracional y barra libre de «propuestas que se mueven en los márgenes más independientes». El festival, que nació en febrero de 2015 en la Fabra i Coats de Barcelona con reclamos como Mujeres, Biznaga y Joe Crepúsculo, aprovechó la mudanza forzosa de hace un par de años, cuando la llegada de vecinos al antiguo complejo fabril acabó con los festivales que ahí se celebraba, para crecer y expandirse por el parque del Fòrum. Con esa fórmula de unas 10.000 personas por día y dos jornadas con una línea estilística más o menos definida, el ·B estrena este viernes nueva edición con el folklore futurista de Rodrigo Cuevas, la electrónica punk de La Élite y Nerve Agent, el indie psicodélico de los argentinos Él Mató a un Policía Motorizado y apuestas de futuro como Jimena Amarillo. El sábado, con las entradas ya agotadas, será el turno de los astros de las músicas urbanas, el día de Ralphie Choo, Soto Asa, La Zowi, Cruz Cafune, Julieta y Mushkaa, nombres que buscan seguir los pasos de cabezas de cartel de anteriores ediciones como Dellafuente, C. Tangana, Bad Gyal o Rels B. En este décimo aniversario, la gran novedad del festival que dirige el músico Adrián D. Bóveda (Novedades Carminha) es el escenario RA·B, espacio consagrado a la electrónica de baile, el neoperreo y la meczcla imposible de techno y death metak. Por ahí pasarán el colectivo Holics Takeover, Kadaira, Marcelo Pantani, Dalila y Mark Luva, entre otros.