La zarzuela, crónica de nuestra España
Como afirma la nueva exposición del Centro Cultural de la Villa ("La Zarzuela. Patrimonio lírico de la Hispanidad. Crónica cantada de nuestra vida"), "ninguna música define tanto el panorama musical español como la zarzuela". Un espectáculo cortesano que nace en el siglo XVII, evoluciona a lo largo del XVIII y se transforma en espectáculo de masas a mediados del siglo XIX. Este género ha sido una constante de nuestra cultura y de nuestra vida y existen pocas instituciones que, como ella, representen y caractericen la identidad nacional y la hispanidad. En cada momento estuvo cargada de significados vivenciales e históricos que ayudaron a expresarse a esa sociedad. Fue diversión, testigo, púlpito, defensor de pobres y maltrechos y surgió de la misma entraña del pueblo con un lenguaje transmisor de cierta alegría social.
No son pocos los que han declarado su admiración al género, como Manuel de Falla, quien no distinguían entre "grande o chica" y aseguraba que, tras mucho tiempo ocupando nuestra actividad musical, sus melodías "perdurarán como timbres gloriosos del arte español y su gracia melódica será difícilmente sobrepujada por nuestros compositores del presente y el porvenir". O Emilia Pardo Bazán, presente ahora en la sala principal del Fernán Gómez: "¿Por qué hemos de incidir en la vulgaridad de desdeñar la zarzuela? En ella hemos descollado, y cuando se dice que nuestra música no logró interponerse en los mercados extranjeros, sé decir que preferiría siempre una zarzuela graciosa y divertida a una ópera de las que no hacen época en la historia del arte".
La zarzuela ha dejado huellas en nuestra vida y ha actuado como una de las argamasas con las que se ha ido construyendo la identidad musical y cultural de España. Desde su nacimiento, como el ave fénix, la zarzuela ha tenido una historia de continua muerte y resurrección que ha llegado hasta hoy. Durante estos cuatro siglos y medio, más de mil compositores y otros tantos libretistas nos han legado no menos de diez mil obras.
Un arte que no solo ha trascendido dentro de nuestras fronteras. Así lo demuestran las palabras de Camille Saint-Saëns en las que se congratulaba "de poder rendir un homenaje al talento de los músicos españoles, tan poco conocidos en Francia, y que merecen tanto serlo. Desde el ilustre Gaztambide hasta usted, querido Bretón, hay toda una pléyade que merece despertar un gran interés: en ninguna otra parte se encontrará una tal abundancia melódica, exaltada por esos ritmos fuertes y pintorescos de los cuales su patria tiene la exclusiva". Veinte años antes, el francés había descubierto "esa mina de oro de la zarzuela".
El objeto de esta exposición comisariada por Emilio Cásares es justamente narrar esta historia con más de 500 obras que demuestran la inmensa riqueza y belleza que ha atesorado y promovido el género. En ella tienen sitio, en primer lugar, los protagonistas: músicos, escritores y artistas y, en segundo, la gran variedad de géneros que se esconden bajo a palabra zarzuela. Pero también los oficios de los artesanos de la zarzuela, partituras de los grandes títulos, escenografías, trajes, cartelería, grabados, caricaturas, retratos, planos de teatros, maquetas, compañías...
La exposición "La Zarzuela. Patrimonio lírico de la Hispanidad. Crónica cantada de nuestra vida" parte del gran legado teatral que se conserva en el Museo Nacional de Teatro de Almagro, la SGAE, la Biblioteca Nacional, pero también de otros museos, bibliotecas, y archivos españoles. Esta muestra que se podrá ver en el teatro Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa es una ampliación de lo que se expuso en el Museo Nacional del Teatro de Almagro en el 2023.