Los islamistas ganan en Jordania unas elecciones celebradas a la sombra de la guerra en Gaza
El principal partido islamista de la oposición jordana ha obtenido 31 de los 138 escaños del Parlamento del Reino hachemí, triplicando su representación en unas elecciones legislativas dominadas por la frustración ante [[LINK:TAG|||tag|||669d41a64dc25d2ff2931e97|||la actual guerra israelí en Gaza]]. El Frente de Acción Islámica (FAI), rama política de los Hermanos Musulmanes en Jordania, se situó por delante de otros partidos y facciones en la legislatura tras la votación de ayer, pero estuvo lejos de conseguir la mayoría, según los resultados electorales oficiales publicados este miércoles.
El resultado supone una victoria histórica para los islamistas y su mayor representación desde que en 1989 los Hermanos Musulmanes obtuvieran 22 de los 80 escaños del Parlamento de entonces. El FAI tenía 10 escaños en el anterior parlamento elegido en 2020 y 16 escaños en la legislatura de 2016.
Los islamistas habían tratado de capitalizar el creciente enfado por la guerra en curso en Gaza entre los jordanos, la mitad de los cuales son de origen palestino. «Estamos contentos con estos resultados y con la confianza depositada en nosotros por el pueblo jordano», declaró a la AFP el secretario general del FAI, Wael al-Saqqa. «Gaza, Palestina y Jerusalén forman parte de la brújula oficial y popular de Jordania y trabajaremos en la movilización» para «conquistar sus derechos y defenderlos».
Prometió Wael al-Saqqa que los jordanos darían a los palestinos «ayuda financiera y de otro tipo, y serían sus pulmones en el camino de la liberación y la consecución de su derecho a un Estado libre».
El presidente de la Comisión Electoral Independiente, Musa Maaytah, declaró en la rueda de prensa en la que anunció los resultados oficiales que el ascenso del FAI era un signo de la «determinación de Jordania de tener pluralismo político».
Resultado sorprendente
Los demás escaños del Parlamento fueron a parar a representantes de las principales tribus jordanas, partidos de izquierda, facciones progubernamentales, centristas, antiguos legisladores y militares retirados.
Veintisiete mujeres obtuvieron escaños en la legislatura, tras las reformas de 2022 que les asignaron más escaños y redujeron la edad mínima de los candidatos. Dicha reforma también amplió el número de escaños de 130 a 138 y trató de reforzar el papel de los partidos políticos en la legislatura.
La participación registró un 32% en unos comicios que se vieron ensombrecidos en gran medida por la guerra de Gaza y los problemas económicos de Jordania. La ofensiva israelí en el enclave palestino ha afectado al turismo en Jordania, que depende de este sector para alrededor del 14% de su producto interior bruto. Para agravar los problemas económicos del país, la deuda pública se acerca a los 50.000 millones de dólares y el desempleo alcanzó el 21% en el primer trimestre de este año.
Jordania firmó en 1994 un tratado de paz con Israel, convirtiéndose en el segundo Estado árabe en hacerlo después de Egipto, pero desde que estalló la guerra en octubre del año pasado se han sucedido las protestas para pedir la disolución del tratado.
Oraib Rantawi, director del Centro de Estudios Políticos Al Quds, con sede en Ammán, calificó de «asombrosa magnitud» la victoria de los islamistas en las elecciones. Los islamistas obtuvieron «casi medio millón de votos», una cifra sin precedentes en su historia en Jordania. «Gaza jugó un papel importante en esto», añadió, así como la sensación entre los votantes de que otros partidos competidores «fueron creados apresuradamente... para reducir las posibilidades de éxito del Frente de Acción Islámica».