ru24.pro
World News in Spanish
Сентябрь
2024

La Ordenatriz : «Hay tres tipos de manchas para las que no he encontrado solución»

0
Abc.es 
Más de 1,6 millones de personas siguen a Bego, La Ordenatriz, en Instagram . Y no es de extrañar porque Begoña Pérez , como realmente se llama, facilita la vida de cualquiera. ¿Tu hijo ha salido del colegio con medio plato de macarrones en el polo? Relax. ¿Te has manchado la blusa con vino tinto? Tranquila. ¿Tus peques han pintado el sofá con sus colores favoritos? No te enfades porque ella tiene la solución para estas cuestiones y muchas en su nuevo libro ' Los trucos de La Ordenatriz ' (Planeta). Se trata de una guía ordenada como un diccionario, de la A a la Z, en la que todo el mundo podrá tener a mano para solventar cualquier estropicio con ingredientes básicos como el bicarbonato, vinagre, jabón en escamas, hielo, laca… - ¿Cuál es la clave para tener tal éxito en las redes sociales? Creo que ha estado en que siempre he ido a dar la solución, sin juzgar la macha o el orden. Hasta la pandemia, trabajé en una empresa familiar, era un estudio de arquitectura, interiorismo, decoración, reformas... Y, en ese tiempo, detecté que no tenemos en cuenta cuáles son las necesidades que tenemos para poner nuestra casa a nuestro servicio. ¡Se suele hacer al revés! Así que, con la pandemia, comencé a publicar contenido de orden y limpieza y vi que gustaba. Cada vez me pedían más y más... - Cuentas en el libro que eres tú misma quien siempre responde a todos y cada uno de los mensajes que recibes pero.... ¿Cuántos puedes acumular en un día? Llegó un momento en que se me fue de las manos, tal y como relato, y eso marcó un antes y un después en mi manera de gestionar la cuenta. Siempre contestaba a todo el mundo y podía recibir una 600 dudas al día, a un minuto por respuesta, haz la cuenta... Dos epicondilitis después y algunos mensajes de quienes se enfadaban porque no les contestaba, me hizo reflexionar. ¡Me pasaba el día contestando, no hacía otra cosa que estar con el teléfono, queriendo llegar a todo el mundo! Pero me di cuenta de que estaba muy enganchada y de que mi tiempo es limitado. Hoy puedo recibir 1.500 dudas al día. Así que decidí tomármelo con mayor tranquilidad, colgando post en Instagram de las dudas que más se repiten y, por supuesto, con este libro. Puede que personalmente no responda a muchas dudas pero en 'Los trucos de La Ordenatriz' los podrán encontrar porque en él están recopiladas las más comunes con sus soluciones. - Bodis de bebé, camisetas de los hijos... Muchas son las prendas que acaban en la basura porque las manchas no salen. Sin embargo, aseguras que todo o casi todo, tiene solución. Cuesta creerlo. Hay muchísimas manchas que creemos que son imposibles de solucionar pero con paciencia y sabiendo qué aplicar, salen. Pero tengo que reconocer que hay algunas que no tienen solución. Sé de tres: una mancha de lejía, a no ser que tiñas la prenda; las del pompero y las manchas de rotulador de pizarra. Es curioso porque sí he logrado eliminar la mancha del rotulador permanente pero no éste. - De hecho, las manchas de las pompas de jabón están en tu libro y comentas cómo se pueden eliminar aunque reconoces que «me temo que la tasa de éxito es muy baja. Valora el esfuerzo». ¿Cómo son las manchas del aparentemente inofensivo pompero? Es una mancha de roce, de agua. Metes la prenda en la lavadora creyendo que va a salir sin problemas... ¡pero no! Algo debe de tener entre sus ingredientes que hace que se incruste en la prenda. Y ya puedes echarle lejía, percarbonato... que no sale. He pensado, aunque no lo he comprobado, que quizás pueda salir si, antes de meterla a la lavadora, le damos con jabón para evitar que se incruste. - En el libro, explicas cuáles son los productos de limpieza imprescindibles que debemos tener en casa: fórmula mágica, agua, limón, vinagre de limpieza... Luego, la publicidad nos bombardeo con múltiples productos. Sin embargo, tú hablas de lo más básico, ¿no? Es la labor del marketing. Sí estoy de acuerdo en que si no sabes cómo quitar una mancha y te venden un producto específico para ella, fenomenal, porque tenemos un ritmo de vida frenético y no siempre tenemos tiempo para pensar e investigar cómo eliminarla. Al mismo tiempo, creo que hay muchos básicos claves. Por ejemplo, todos, al final, se basan en el jabón y, la pastilla de toda la vida la tenemos denostada cuando es ingrediente clave en muchos detergentes. Por eso me he ido a lo básico. Al final, si sabes de qué es la mancha, la podrás tratar. Por ejemplo, para el óxido, la sal y el limón nunca fallan. - Así que el rincón de la limpieza en casa, o el lavadero, ideal, es aquél que tiene sólo los productos necesarios, ¿no? ¡Claro! Los básicos son imprescindibles. Tenemos que pensar, ir con cabeza, qué tenemos, los que más usamos, los que menos... Y hacer limpieza. No hay que tirarlos, más bien gastarlos, pero si son cosas que apenas usas, ¿para qué volver a comprar? Las bayetas de microfibra son importantísimas, por ejemplo, y con ellas, sin producto alguno, sólo con un poco de agua, podemos limpiar los muebles de madera. ¡No hace falta más! Si limpiamos la madura con un producto oleoso, lo único que vamos a hacer es ir añadiendo capa tras capa al mueble y eso sí será más difícil de quitar a largo plazo. Y, por supuesto, el rincón de la limpieza tiene que estar diseñado acorde a nuestra vida, como decía antes. Si lo tenemos en la cocina, por ejemplo, procuremos tener una cocina sin demasiados pequeños electrodomésticos si no somos cocinillas porque gastamos muchas veces dinero en cosas innecesarias. Por tanto, no hay una regla única. Sólo tenemos que pensar qué tipo de vida tenemos y qué vamos a usar. - Pero sólo agua... ¡no limpia! (risas) Tenemos la creencia de que cuanto más producto, mejor, y no porque uses más jabón, eres más limpio. Si no recuerdo mal, España es el segundo o tercer país que más detergente gasta en la lavadora. Desde que tengo redes sociales, he visto que solemos pasarnos a la hora de echar el detergente y tampoco sabemos usar bien este electrodoméstico. Cada programa de la lavadora tiene sus funciones: no podemos pretender lavar todo media hora porque estos lavados no van a ser efectivos. Habrá gente que me diga que no puede poner lavados largos porque si no la factura de la luz se le dispara. Lo entiendo. Quizás puedan buscar soluciones como hacerlo en los horarios más económicos, poner placas solares, tener una lavadora eficiente... - Estamos a un paso de guardar la ropa de baño. ¿Qué debemos hacer?   Los trajes de baño suelen presentar dos problemas. El primero, las manchas blancas, amarillas o incluso marrones provocadas por las cremas solares. El segundo es que, debido al cloro, se ponen amarillentos. Para abordar las primeras manchas, basta con usar alcohol, el de las heridas. Todos lo tenemos en casa, ¿verdad? Frotamos la mancha con él y, después, volvemos a frotar bajo el agua. En el segundo caso, metemos el bañador en vinagre de limpieza durante dos horas. Luego, a la lavadora a 20-30 grados. Sé que lo mejor es lavarlo a mano pero, en un programa para prendas delicadas y metiendo el traje en una malla, no habrá problema. Después toca tender pero no al sol. Si vivimos en zonas húmedas, a la hora de guardarlos, echar polvos de talco en la prenda para que esté seca y al año siguiente podamos usarlo, sin que parezca que se ha estropeado. Y jamás hay que guardarlos en bolsas de plástico porque no transpiran. - De cara al cambio de armario, hay veces que las prendas guardadas aparecen con manchas que antes no tenían. ¿Cómo es posible? ¡Hay que tomárselo con calma para hacerlo bien! Te diré que esas manchas extrañas suelen ser de grasa. No es que no las hayamos visto, es que normalmente no se ven porque parece que las hemos quitado y van adquiriendo color porque se van oxidando. Para quitarlas hay que frotar con la pastilla de jabón y poner la prenda al sol. Si no sale, usar percarbonato, un oxígeno que se activa a 40 grados. Lo dejamos dos horas y a la lavadora con el programa adecuado. - ¿Y esas manchas extrañas que aparecen en las prendas al sacarlas de la lavadora que antes no tenían? Cuando a la lavadora no la tratamos bien, llega un momento en el que expulsa la grasa que tiene acumulada en el tambor. Por eso insisto en utilizarla de manera adecuada. Cuando la cargamos mucho, la estropeamos. El tambor soporta un peso determinado. Para saber que no nos pasamos, mete la ropa y comprueba metiendo tu brazo y extendiendo la mano verticalmente, si sobra un palmo entre la ropa y el tambor. Si apenas cabe, es que te has pasado de ropa. Y otro consejo: las toallas coge mucha agua, por tanto, incrementan su peso. Hay que poner poca cantidad. Por tanto, ante estas manchas, lo ideal es meter la prenda en fórmula mágica entre 8 y 12 horas. Como son manchas de grasa incrustadas, hay que tener mucha paciencia. Luego, a la lavadora. - ¿Cómo se limpia la lavadora? Echando un vaso de lejía al tambor y otro medio vaso en el cajetín del detergente. Pones un lavado largo para que pase por todos los conductos y se limpie bien. - Ahora que acaba el verano, es buen momento para limpiar el frigorífico y acabar con todo lo congelado ante el nuevo curso escolar. ¿Cómo lo limpiamos? Suelen cometerse dos fallos. El primero, dejar un alimento que se estropea y que desprende olor. Por otro lado, si durante las vacaciones se ha ido la luz y se nos ha estropeado lo poco que teníamos... huele también. ¡No hay que tirar la nevera! Una cosa medio novedosa es pasar bayetas empapadas de detergente (no el de la lavadora) con oxígeno activo, que quita fenomenal los olores, aunque previamente hemos de lavar con agua y jabón. Esas bayetas, además, las dejaremos en cuencos en cada balda para absorber los olores. ¡Y no dejan olor añadido! - Nunca es buen momento para limpiar el horno... Cierto, llevamos un ritmo de vida tan a tope que no caemos en que tenemos que limpiarlo. Pero no podemos estar así. Lo mejor es hacerlo tras usarlo, una vez se enfríe, con agua y jabón. Si la grasa está pegada, bastara con echar bicarbonato y vinagre de limpieza. Lo dejamos actuar entre una y dos horas, y luego sale todo.