Valpuesta: la base del castellano escrito
Valpuesta, una pequeña aldea en la provincia de Burgos, España, se destaca como un punto de referencia en la historia del lenguaje español. Aunque actualmente solo tiene una población de 20 personas, este lugar posee una importancia destacada en la evolución del idioma español debido a su gran patrimonio filológico: los Cartularios de Valpuesta, los cuales contienen los primeros registros escritos del castellano. La Real Academia Española (RAE) ha considerado estos textos del siglo IX más antiguos que los del Monasterio de San Millán de la Cogolla, que tradicionalmente se habían considerado los más antiguos. En esencia, Valpuesta es una zona filológica importante en la evolución del español.
Los Cartularios de Valpuesta
Los Cartularios de Valpuesta son una recopilación de documentos monásticos, la mayoría de los cuales están escritos en latín, pero también incluyen palabras y expresiones en castellano antiguo. El Monasterio de Santa María de Valpuesta, establecido en el siglo IX, fue un lugar importante para la religión y la cultura en el Reino de León en ese momento. Los documentos eran principalmente registros de donaciones, propiedades y asuntos legales relacionados con el monasterio y las tierras cercanas. Estos escritos son únicos porque, a medida que el latín vulgar se desarrollaba y se integraba con las lenguas locales, los monjes dejaron huellas del lenguaje que más tarde se convertiría en castellano.
Los cartularios no eran textos literarios ni escritos con la intención de preservar la lengua, sino documentos funcionales que reflejaban el uso cotidiano de la lengua. No obstante, su importancia radica en su evidencia directa de cómo el latín, el idioma culto de la época, se estaba desvaneciendo y sustituyendo al castellano, el idioma romance que estaba empezando a prosperar en la zona.
Más Antiguos que San Millán de la Cogolla
Desde hace mucho tiempo, se pensó que los escritos encontrados en el Monasterio de San Millán de la Cogolla, en La Rioja, eran los primeros escritos en castellano. No obstante, según estudios realizados recientemente por la RAE, los Cartularios de Valpuesta son aún más antiguos. Los escritos de San Millán son del siglo X, mientras que los de Valpuesta son del siglo IX, lo que les otorga el papel de los primeros documentos escritos en español.
El hallazgo ha llevado a una revisión de la historia del castellano, ubicando a Valpuesta en el centro del origen del idioma. Es fascinante cómo en esta pequeña comunidad, lejos de las grandes ciudades, se estaba desarrollando una de las lenguas más habladas del mundo.
El Monasterio de Valpuesta y su Legado
En su época, el Monasterio de Santa María de Valpuesta tuvo una gran relevancia religiosa y cultural. Durante varios siglos, fue sede de una diócesis desde el siglo IX. A pesar de que el monasterio se encuentra en estado de ruinas y no tiene la importancia que tuvo en su época dorada, su legado sigue siendo preservado gracias a los registros que sus monjes crearon.
Los Cartularios de Valpuesta, que se encuentran actualmente en el Archivo Histórico Nacional, son una de las pruebas más significativas de la transición del latín al romance. Es evidente en estos documentos cómo los monjes, al tratar de temas cotidianos como la donación de tierras, involuntariamente registraban el cambio lingüístico que estaba ocurriendo.