Inicio de investigación sobre caso de enfermera británica condenada por muerte de siete bebés
Una investigación independiente comienza este martes para estudiar eventuales responsabilidades del hospital y del servicio británico de salud en el caso de la enfermera Lucy Letby, que mató a siete bebés y fue condenada a cadena perpetua.
Letby, de 34 años, la mayor asesina en serie de bebés en el Reino Unido de la historia moderna, fue condenada en agosto de 2023 a cadena perpetua por el asesinato de siete recién nacidos prematuros en 2015 y 2016, en la unidad de cuidados intensivos del hospital Countess de Chester, en el noroeste de Inglaterra.
La enfermera fue también declarada culpable de otros siete intentos de asesinato de bebés.
Lucy Letby, que insiste en su inocencia y cuyos motivos nunca han sido aclarados, vio como la justicia británica le negó la posibilidad de apelar la sentencia de cadena perpetua.
Poco después de que se anunciara hace un año el veredicto, el gobierno británico ordenó una investigación independiente para "garantizar que las familias obtengan las respuestas que necesitan".
La investigación, que comienza el martes en Liverpool, se centrará "en las circunstancias detrás de los horribles asesinatos e intentos de asesinato de bebés" en el Hospital Countess de Chester y se espera que las audiencias duren al menos hasta finales de año.
Entre los temas a estudiar por la investigación, dirigida por Kathryn Thirlwall, une antigua jueza del tribunal británico de apelación, está determinar si "las sospechas deberían haberse planteado antes, si Lucy Letby debería haber sido suspendida antes y si la policía (...) debería haber sido informada antes de las sospechas contra ella".
La investigación estudiará la actitud en el caso de la junta directiva del hospital y los médicos, así como las respuestas dadas por los funcionarios del centro cuando surgieron preocupaciones sobre Lucy Letby.
En términos más generales, analizará también el funcionamiento del servicio de salud pública británico (NHS) y la eficacia de sus estructuras de control.
La enfermera fue acusada de inyectar aire a los bebés por vía intravenosa y mediante sondas naso-gástricas, además de administrar sobredosis de leche a los recién nacidos.
Esta investigación comienza cuando la prensa británica transmite las dudas de los expertos sobre las pruebas de la culpabilidad de Lucy Letby.
Tamlin Bolton, abogada de las familias de seis víctimas, afirmó que sus clientes están "llenos de esperanza pero con mucha ansiedad" antes de la investigación.
Trasladada en junio de 2016 a un servicio administrativo, Letby fue detenida una primera vez en 2018, y luego en 2019, para ser finalmente encarcelada en noviembre de 2020.