Las universidades gallegas recibirán financiación por valor del 1% del PIB autonómico

Galicia se convertirá, en esta legislatura autonómica, en la primera comunidad que alcanza el 1% del PIB en recursos públicos transferidos o captados por sus universidades; y lo logrará, además, con mucha anticipación, teniendo en cuenta que se trata de un objetivo general para toda España con su cumplimiento fijado en el año 2030. Lo ha afirmado este viernes el conselleiro de Educación, Ciencia, Formación Profesional y Universidades, Román Rodríguez, en un acto de apertura del curso académico 2024-25 del Sistema Universitario Galego, en La Coruña. El titular del ramo, que se ha referido a los centros de esta red como los «más accesibles y mejor financiados» del país, también ha reivindicado la «medida histórica» a nivel estatal que la Comunidad estrena este curso: la gratuidad de la matrícula para estudiantes de las tres universidades públicas , siempre que estos logren un aprobado en la ABAU –futura PAU– o alcancen un mínimo de créditos en los cursos de carrera, en función del caso. La cuestión del financiamiento público universitario la había puesto sobre la mesa, minutos antes, el rector de la Universidade da Coruña (UDC), Ricardo Cao, que demandó un incremento de la inversión. Según recoge Ep, Cao ha señalado lo «urgente» de acompasar el plan de financiación «a las necesidades reales de los costes estructurales del sistema universitario, dando también cumplimiento al objetivo de alcanzar la inversión del 1% del PIB en universidades» que fija la Ley Orgánica del Sistema Universitario Español (LOSU); misma tasa que el conselleiro ha marcado como meta para la presente legislatura. En cualquier caso, el rector ha apelado a labrar consensos entre Xunta, universidades y fuerzas políticas parlamentarias para seguir cosechando avances. Por su parte, Román Rodríguez ha puesto en valor el actual Plan de Financiación Universitaria como «señal de identidad» de Galicia, una «de las pocas comunidades autónomas de España que tiene un financiamiento plurianual», lo que «permite dar certezas» y «planificar la gestión» que ejerce cada centro. «Circunstancia que en Galicia es absolutamente normal, pero que en otras CCAA es excepcional» y que forma parte de «una senda financiera que incrementa progresivamente los recursos de las instituciones universitarias y tiene permitido aprobar, en tiempo y forma, presupuestos», ha destacado el conselleiro. También ha hecho referencia a la «medida histórica» para el modelo educativo no gallego y estatal que su pone la bonificación de la matrícula universitaria, «un hito sin precedentes en el apoyo a la educación superior» que «rebaja al máximo las limitaciones económicas que pudiesen existir para avanzar en los estudios universitarios, y democratiza aun más la enseñanza superior en nuestra comunidad, fortaleciendo la igualdad de oportunidades como nunca antes», ha avalado. Siempre que un alumno de primer curso apruebe la ABAU o, en el resto de casos, logre «un mínimo número de créditos, para intentar mantener con esta medida la cultura del esfuerzo», la medida de gratuidad que se le aplicará al iniciar sus estudios en las tres universidades o en los centros de enseñanza artística superiores supondrá «un desembolso por estudiante de solo 60 céntimos al mes», ha expuesto el titular de Universidades. A mayores, Román Rodríguez ha llamado la atención sobre la necesidad de «fomentar» el tejido investigador y científico gallego y consolidar su potencial en I+D+i. Para ello, ha dicho, la mejor baza de Galicia es apostar por una «fórmula propia» que priorice «la utilidad, la innovación y el conocimiento» para que repercutan beneficiosamente en el territorio, y diferenciarse en lugar de apuntar a emular centros de referencia «como Oxford, Stanford, Harvard» u otros. «Este no debe ser nuestro objetivo», ha apuntalado. Como colofón, después de situar las partidas vinculadas a I+D+i en Galicia en el 25% de la financiación universitaria, «el mayor porcentaje de España», ha animado a seguir reforzando las sinergias entre los centros tecnológicos universitarios «para construir redes más potentes y acelerar el impacto» de sus aportaciones.