Vuelta a España: Comitas, la telemedicina que nació para el ejército y asiste a los ciclistas
Si Wout Van Aert hubiera podido acabar la etapa que terminaba en los Lagos de Covadonga, en la meta le hubiera esperado una visita a la unidad móvil de Comitas, el servicio de telemedicina que acompaña a la Vuelta desde el año pasado. Una unidad móvil con una máquina de rayos X para ahorrar tiempo, desplazamientos y angustias a los ciclistas.
«Nosotros tenemos la posibilidad de hacer ecografías, pero en la Vuelta el servicio que se da es el de Rayos X porque es el más necesario. El año pasado subimos a puertos como Javalambre o el Tourmalet, que el centro de salud más cercano estaba a una hora y no tenía sala de rayos ni siquiera. Eso les ha supuesto un problema durante muchos años y el año pasado tanto los equipos como la organización lo vieron un servicio muy útil y este año han querido tenerlo otra vez», cuenta Pablo Antuña, uno de los miembros del equipo de marketing de Comitas e-health presente en la Vuelta.
«El factor psicológico es en lo que más les hemos ayudado. Luis León Sánchez cuando se cayó el año pasado llegó con su cámara, que nos regaló el vídeo después, y se ve la cara con la que entra y la cara con la que sale cuando ya sabe que no se ha roto nada. Totalmente tranquilo. Estoy seguro de que estaba en su cabeza “es mi última Vuelta, no voy a poder seguir, seguro que me he roto algo, me duele mucho” y cuando vio las pruebas le dejó de doler. Acabas en cinco minutos con ese problema», añade Antuña.
Comitas se plantea su presencia en la Vuelta como si fuera un sello de calidad, una certificación. Y quiere extenderse a otras carreras y a otros terrenos. «Hablamos con muchos organizadores de carreras y nos dicen ''llevo cinco ambulancias''. Y digo ¿por qué no llevas cuatro ambulancias? Tiene que haber una medicalizada, dos por si acaso... ¿Por qué no llevas una menos y llevas una unidad móvil y así reduces la carga de trabajo que van a tener las ambulancias? Somos un complemento a la asistencia sanitaria en carrera. Porque acaban siendo taxis, igual que en las zonas despobladas. Y en las urgencias, igual. Nosotros también tenemos equipos en las urgencias y lo que dicen los centros hospitalarios es que el 80 por ciento de las urgencias no son urgencias. Es gente que le pasa algo y como le van a dar cita para dentro de mucho tiempo, va a urgencias. La telemedicina, las unidades móviles y todo esto sirve para agilizar los recursos sanitarios de la mejor manera posible», asegura Pablo Antuña. Algunos de los médicos de equipo hacen el seguimiento de las lesiones de sus ciclistas en la unidad móvil de Comitas, lo que les permite saber en todo momento cómo evolucionan sin necesidad de desplazarse a un hospital.
La España vacía es uno de los lugares donde la telemedicina tiene mayor sentido porque supone cercanía, ahorro de tiempo y de desplazamientos. El ejército fue el primero en implantar las unidades de telemedicina. Pero hay otras aplicaciones en las que resulta sustancial. «Tenemos un proyecto muy interesante con un velero, el Forquilla, que es una familia, una pareja y un niño pequeño que han decidido dar la vuelta al mundo y no tienen fecha de regreso. El mundo náutico nos interesa mucho y esto puedes tenerlo con la conexión que quieras, por satélite, por 4G, nosotros tenemos convenios con diferentes empresas que dan servicio médico. Vithas y Quirón nos han elegido como partners en telemedicina. De igual manera nosotros damos conexión satelital. Les hemos dado un maletín con el que tú puedes hacer todas estas pruebas médicas independientemente de donde estén. Lo llevan en el velero y tienen conexión en tiempo real con un médico en medio del océano. Ellos utilizan los dispositivos para que el médico de Quirón que está en remoto pueda diagnosticar y aparte ellos tienen un botiquín complementario. Puedes resolver muchas consultas con las medicinas del botiquín complementario. Por ejemplo, un marinero tuvo un infarto y conectó con un cardiólogo en Vigo, le estuvo monitorizando, le recetó una medicación y a las ocho horas consiguieron llegar a puerto. El cardiólogo nos dijo que ese hombre hubiera fallecido con total seguridad. Poder ayudar en esas situaciones, tener un equipo que no te resuelva el problema pero que te permita ganar el tiempo para poder llegar al centro hospitalario», cuenta Pablo.
La Vuelta se siente más segura con Comitas.