Conozca la clave del teletrabajo saludable para las mamás
El teletrabajo se ha convertido en una opción cada vez más común para muchas madres, permitiendo una mayor flexibilidad y la posibilidad de estar más cerca de sus hijos. Sin embargo, este modelo también puede traer consigo una serie de desafíos que afectan tanto la salud emocional como física de las madres. Es esencial abordar el teletrabajo de manera correcta para evitar el agotamiento y mantener un equilibrio saludable entre las responsabilidades laborales y familiares.
Lo primero es identificar errores muy comunes, que en ocasiones suceden sin darse cuenta, por ejemplo:
El desequilibrio
- Sobrecarga de responsabilidades: Al trabajar desde la casa, muchas madres asumen simultáneamente las responsabilidades del hogar y el cuidado de los hijos, lo que puede llevar a una sobrecarga de tareas y a una sensación de agotamiento constante.
- Límites difusos entre trabajo y hogar: La falta de separación física entre el espacio laboral y el hogar puede dificultar la desconexión del trabajo, extendiendo la jornada laboral y reduciendo el tiempo de descanso y relajación.
- Interrupciones constantes: La presencia de niños en casa puede resultar en frecuentes interrupciones durante la jornada laboral, afectando la concentración y la productividad.
- Falta de apoyo: Sin la interacción con colegas, compañeros de trabajo y el apoyo de una red laboral, las madres que teletrabajan pueden sentirse aisladas y carecer de un sistema de apoyo adecuado.
No involucrar a los miembros de la familia en la gestión de las tareas del hogar y el cuidado de los hijos puede resultar en una sobrecarga de responsabilidades para la madre. Delegar tareas y responsabilidades entre todos los miembros de la familia puede crear un entorno más colaborativo y reducir la carga para la madre. Establecer una rutina y expectativas claras para cada miembro puede facilitar este proceso.
Estrategias para teletrabajo sano
- Lo primero es designar un área específica de la casa como su oficina puede ayudar a crear una separación clara entre el trabajo y la vida familiar. Este espacio debe ser cómodo, bien iluminado y libre de distracciones en la medida de lo posible.
- Otro indispensable es establecer y respetar un horario de trabajo fijo. Comunicar este horario a todos los miembros de la familia puede ayudar a minimizar las interrupciones y asegurar que tenga tiempo reservado para descansar y desconectar del trabajo.
- Otra recomendación para alcanzar el anhelado equilibrio, es organizar y priorizar las tareas diarias, ya que al hacerlo puede aumentar la eficiencia y reducir el estrés. Utilizar listas de tareas y técnicas de gestión del tiempo, como el método Pomodoro, puede ser útil para mantener el enfoque y la productividad.
- En la misma línea de la eficiencia, es necesario tomarse pequeños descansos durante la jornada laboral para mejorar la concentración y prevenir el agotamiento. Utilizar estos momentos para estirarse, tomar un respiro o simplemente relajarse puede ser muy beneficioso para su bienestar.
- Dedicar tiempo a actividades que le resulten relajantes y placenteras es esencial para mantener un equilibrio emocional. Practicar ejercicio, meditar, leer o disfrutar de un pasatiempo son formas efectivas de reducir el estrés.
- También es muy importante, mantener una comunicación abierta y honesta con su jefatura sobre sus necesidades y desafíos en busca de un mayor apoyo y flexibilidad. No dude en plantear la necesidad de ajustes en su carga laboral o en su horario si es necesario.
- Y, finalmente, no dude en delegar tareas del hogar o pedir ayuda a su pareja, familiares o amigos. Es importante reconocer que no tiene que hacerlo todo sola y que pedir ayuda no es un signo de debilidad.
Al lograr este equilibrio no solo mejora su bienestar físico y emocional, sino que también puede aumentar su productividad y eficiencia laboral. Un enfoque equilibrado permite a las madres disfrutar más de su tiempo en familia y ser más presentes y efectivas en sus roles tanto laborales como familiares. Además, un equilibrio saludable contribuye a un entorno familiar más armonioso y reduce el riesgo de agotamiento y estrés.
Establecer límites claros, priorizar tareas, pedir ayuda y fomentar el autocuidado son pasos esenciales para crear un entorno de teletrabajo saludable y sostenible. Al cuidar de sí misma, también estará mejor equipada para cuidar de su familia y desempeñar sus responsabilidades laborales de manera efectiva.