Varios miembros de la campaña de Trump «maltrataron y empujaron» a un funcionario del cementerio de Arlington
Varios miembros del equipo de campaña del expresidente Donald Trump se han visto envueltos en un altercado físico con un funcionario del Cementerio Nacional de Arlington. El candidato republicano a la Casa Blanca acudió el pasado lunes al cementerio militar, situado a las afueras de Washington, para asistir a una ceremonia de colocación de coronas de flores en conmemoración de los tres años de la caótica retirada de EE UU de Afganistán, en la que murieron 13 militares estadounidenses.
El altercado tuvo lugar cuando un funcionario del cementerio trató de impedir que el personal de la campaña filmara y tomara fotografías en una zona donde recientemente habían sido enterrados miembros del servicio, conocida como Sección 60. En ese momento, el personal de Trump «abusó verbalmente y empujó al funcionario a un lado», según informa el servicio de radiodifusión pública estadounidense NPR. El Cementerio Nacional de Arlington emitió un comunicado el miércoles confirmando los hechos.
«No hubo ningún altercado físico como se describe y estamos preparados para publicar imágenes si se hacen tales afirmaciones difamatorias», respondió Steven Cheung, portavoz de la campaña de Trump. «El hecho es que se permitió la entrada de un fotógrafo privado y, por la razón que fuera, un individuo anónimo, que sufría claramente un episodio de salud mental, decidió bloquear físicamente a miembros del equipo del presidente Trump durante una ceremonia muy solemne».
La campaña aún no ha hecho públicas dichas imágenes. Chris LaCivita, un asesor de la campaña del candidato republicano, añadió que el funcionario del cementerio era «una vergüenza y no merece representar los sagrados terrenos del Cementerio Nacional de Arlington». Y el cementerio replicó a través de un comunicado: «La ley federal prohíbe las actividades relacionadas con campañas políticas o elecciones dentro de los cementerios militares nacionales del Ejército, para incluir fotógrafos, creadores de contenido o cualquier otra persona que asista con fines, o en apoyo directo de la campaña de un candidato político partidista».
Hay casi 400.000 personas enterradas en Arlington, entre ellas el presidente John F. Kennedy, su esposa, Jackie, y sus hermanos Robert y Edward. El cementerio acoge hasta 30 entierros diarios. Unas normas estrictas determinan quién puede ser enterrado aquí.
Trump estuvo en Arlington para cargar contra la gestión de la retirada de Afganistán efectuada por la Administración de Joe Biden, cuando las Fuerzas Armadas estadounidenses y sus aliados se enfrentaron a un pandemónium en el aeropuerto internacional de Kabul mientras miles de personas intentaban escapar tras el regreso de los talibanes. Un terrorista suicida mató a los 13 miembros del servicio, la mayoría de ellos del Cuerpo de Marines.
Más tarde, en la tarde del lunes, en una parada de campaña en Detroit, Trump responsabilizó del suceso en Kabul a la vicepresidenta Kamala Harris, que se ha convertido en su rival demócrata por la Casa Blanca, y a Biden de lo que calificó de «catastrófica» salida de Afganistán.