Arabia y su dinero no pudieron con Kubo
Solo hace falta escuchar a Kubo para que uno se dé cuenta de que es diferente. Dentro del terreno de juego tiene una chispa especial, pero ante los micrófonos tampoco se corta. En su última entrevista para ‘France Football’, el nipón aseguró haber rechazado una oferta mareante de un club saudí. Su buen rendimiento en la Real atrajo el interés de los magnates de la Saudi Pro League y al extremo de la Real le hicieron llegar una propuesta que pocos jugadores rechazarían. Según el mismo jugador, se trataba de un salario de 40 millones de euros por temporada, con un contrato de cuatro años. Algo que no solo habla de la inflación a la que están sometidos estos equipos billonarios, sino también del saber estar de Kubo, que antepuso su vida futbolística a los petrodólares. De hecho, el japonés afirmó que siempre lo ha tenido claro desde sus comienzos en el mundo del fútbol: “Lo más importante para mí desde niño ha sido jugar contra los mejores y con los mejores”, afirmaba el de Osaka. Sin embargo, no cerró la puerta a un futuro cambio de aires, aunque mucho debería de cambiar la liga árabe para que el japonés acabe recalando en uno de sus equipos: “Si un día, pronto o muy lejano, Arabia Saudí se convierte en la mejor liga del mundo por méritos deportivos, iré. Pero de momento, solo es atractiva económicamente”.