Los casos de absentismo laboral por baja médica se duplican en los últimos 11 años
La evolución del absentismo en España es “alarmante”, sobre todo en el caso de las ausencias por baja médica. Más de 1,43 millones de españoles no acudieron a diario a su puesto de trabajo en el primer trimestre del año, de los cuales la mayoría, 1,10 millones (77,3%) se ausentó por una incapacidad temporal (baja médica), el doble que en 2013, mientras que el resto lo hizo por otros motivos o no justifica su ausencia. Teniendo en cuenta que la cifra de españoles ocupados ascendía a 21,25 millones en el primer trimestre de 2024, según la Encuesta de Población Activa, el nivel de absentismo laboral –la ausencia del trabajador de su puesto de trabajo cuando estaba prevista su presencia– fue del 6,7% entre enero y marzo de 2024, cuatro décimas por encima que un año antes, mientras que el absentismo por incapacidad temporal supuso la pérdida del 5,2% de las horas pactadas, según el Informe de absentismo laboral del primer trimestre de 2024 elaborado por Randstad.
“El absentismo laboral se configura como un problema grave para las empresas españolas, con un impacto directo sobre la productividad y los costes empresariales, lastrando asimismo su competitividad”, advierte Randstad, que alerta especialmente sobre la preocupante evolución del absentismo por baja médica, el más común. El problema ha pasado de ser coyuntural a estructural por las largas listas de espera en el sistema sanitario público, el uso indebido de estas prestaciones y el laberinto burocrático conformado por las entidades gestoras, la Seguridad Social y las mutuas.
Para atajar las ineficiencias en los procesos de incapacidad temporal por contingencias comunes, las mutuas colaboradoras con la Seguridad Social venían reclamando mayor margen de actuación. El acuerdo alcanzado a finales de julio entre la Seguridad Social, los sindicatos y la patronal para retocar las pensiones recoge que los médicos de la sanidad pública podrán derivar a las mutuas casos de Incapacidad Temporal en enfermedades comunes de origen traumatológico para realizar pruebas complementarias, lo que siempre estará sujeto a la voluntariedad y consentimiento de los ciudadanos. No obstante, "las bajas, confirmaciones de baja y altas médicas continuarán siendo emitidas por los facultativos de los servicios públicos de salud", recoge el texto, pese a que la aspiración de la mutuas era poder encargarse de estos trámites.
La incidencia del absentismo no es homogénea en todo el territorio español. Las regiones con el absentismo más pronunciado son País Vasco (8,9%), Canarias (8,3%) y Asturias (8,2%). En cambio, Baleares (5,1%), Madrid (5,8%) y Andalucía (6,2%) presentan niveles más bajos. En el caso del absentismo debido a bajas médicas, las comunidades que cuentan con los mayores niveles de absentismo fueron Canarias (7%), País Vasco (7%) y Asturias (6,6%), mientras que los niveles más bajos se encontraron en Baleares (4%), Madrid (4,5%) y La Rioja (4,6%).
Por sectores, los de actividades postales y de correos y actividades de juegos de azar y apuestas encabezan la lista con una tasa de absentismo del 11,9%. Les sigue el sector de servicios a edificios y actividades de jardinería, que muestra una tasa de absentismo del 11,3%. Por otro lado, sectores como las actividades de servicios sociales registran una tasa de absentismo del 9,6%; el sector de metalurgia un 8,8%; y el de la administración pública y defensa, junto con la seguridad social presentan un 8,7% de absentismo, justo dos puntos porcentuales por encima de la media. En cuanto a los mayores repuntes, el sector que más ha visto incrementados sus niveles de absentismo es el de servicios a edificios y actividades de jardinería, con un crecimiento interanual de 1,1 puntos porcentuales respecto al mismo trimestre del año anterior.
En el lado contrario, las tasas más bajas de absentismo corresponden a las actividades relacionadas con el empleo (2,7%), y las actividades jurídicas y de contabilidad, con un 3,1%. Otros sectores con bajas tasas de absentismo son las actividades inmobiliarias, con un 3,2%, y el sector de edición, con un 3,3%. También destacan los sectores de investigación y desarrollo, con una tasa del 3,6%, y los servicios técnicos de arquitectura e ingeniería, con un 3,7%. Las mayores reducciones se dan en actividades de agencias de viajes, operadores turísticos y actividades relacionadas y en el de actividades inmobiliarias, con caídas interanuales del absentismo de 1,3 y 0,3 puntos porcentuales, respectivamente.