El puzle imposible de la gobernabilidad en Aragón tras la marcha de Vox
Ha sido la cuestión migratoria la que ha puesto fin al pacto de PP y Vox en el Gobierno de Aragón, así como al resto de comunidades en las que gobernaban juntas ambas formaciones políticas. Santiago Abascal ha anunciado la salida de Vox de los gobiernos autonómicos y que su partido “pasará a la oposición”. Han sido semanas de amenazas por parte de Vox y reticencias por parte del Partido Popular, que, en esta ocasión, no ha aceptado las imposiciones de la formación de extrema derecha respecto a la inmigración y Aragón acogerá los 20 menores migrantes según el reparto que se estableció ayer en la Mesa Sectorial.
Tras la decisión, que supone la salida de Alejandro Nolasco y Ángel Samper del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero, la Vicepresidenta del Gobierno de Aragón, ha comunicado que será el viernes por la mañana cuando Azcón anuncie la reestructuración que se va a llevar a cabo en el Gobierno de Aragón y no ha entrado en detalles de cómo será el organigrama ni si se incorporarán dos consejeros nuevos para sustuir a los de Vox. Sí que ha dicho que el nuevo gobierno “será en solitario”.
La salida de Vox del Gobierno de Aragón pone las cosas muy díficiles al PP, que perdería la mayoría absoluta (34 diputados, 28 del PP y siete de Vox) que ahora ostenta en las Cortes de Aragón. Sumando con el PAR y Teruel Existe, la primera opción de Azcón tras las elecciones de 2023, solo sumarían 32 diputados, por lo que sacar adelante los proyectos en el hemicilio aragonés será mucho más complicado.
En cuanto a la composición del gobierno, Vox ostenta dos consejerías, la de Agricultura y Ganadería, dirigida por Ángel Samper, y la de Desarrollo Territorial, Despoblación y Justicia, que encabeza Alejandro Nolasco, quien también es Vicepresidente primero. Estos serán los primeros que saldrán del organigrama, a los que seguirán los ocho directores generales que han nombrado, los jefes de gabinete, secretarias y el propio equipo de comunicación, formado por tres profesionales.
Desde la oposición, el secretario de Organización del PSOE Aragón, Darío Villagrasa, ha alertado del “incerto panorama” de la comunidad: “Nos enfrentamos al gobierno más corto de la historia de Aragón y eso es muy grave porque nos han abocado a una crisis sin precedentes”. También ha criticado la ausencia de Azcón durante el día, ya que ha sido Mar Vaquero la encargada de comunicar la posición del PP: “Tiene que explicar a los aragoneses qué va a hacer tras su fracaso”.
Desacuerdos sobre la cuestión migratoria
La política migratoria de Vox es contraria a la acogida y aboga por la deportación de los menores migrantes que llegan a Canarias y que se encuentran en las islas. Nolasco, el líder de Vox en Aragón, ha manifestado en varias ocasiones su oposición a la acogida de cualquier persona en situación irregular.
Sin embargo, su socio de Gobierno, el PP, siempre ha mantenido una posición contraria. A pesar de no estar de acuerdo con las medidas del Gobierno Central, el PP ha sostenido en todo momento que se rigen por el principio de solidaridad y que Aragón acogerá migrantes siempre que cuente con la financiación necesaria.
Casi un año de desacuerdos
En estos 11 meses de gobierno, el PP ha tenido que aceptar y defender varias cuestiones contrarias a su programa. De hecho, el gobierno de coalición empezó ya con evasivas por parte del PP, Azcón estuvo semanas negando que Vox fuera a entrar en el Ejecutivo y decantándose en público por un pacto con Teruel Existe y PAR. Sin embargo, los números no daban y finalmente Vox entró al Gobierno de Aragón con dos consejerías, la Vicepresidencia primera en manos de Alejandro Nolasco y la Presidencia de la Mesa de las Cortes de Aragón.
De hecho, la primera muestra de acuerdo entre PP y Vox fue precisamente el nombramiento de la presidenta de la Mesa de las Cortes de Aragón, Marta Fernández. Fue designada en junio y, a las pocas horas de que se hisense público su nombre, borró el contenido de sus redes sociales. En ellas había mensajes de odio con contenido transfobo, xenófobo, fanatismo religioso, negacionismo climático o antifeminismo. A pesar de ello, Fernández continuó en su puesto con el apoyo del PP.
Durante las negociaciones, el PP ofreció a Vox dos opciones: la entrada en los ayuntamientos del PP en Huesca y Zaragoza, o las consejerías, la vicepresidencia y la presidencia de las Cortes. Vox se decantó por la segunda opción, pero en las votaciones de los presupuestos de Huesca y Zaragoza presionó al PP en un intento por entrar en los gobiernos municipales. Finalmente, Azcón habló con la dirección nacional de Vox y las cuentas de Huesca y Zaragoza se aprobaron. Aunque Vox apoyó estos presupuestos, puso condiciones como acabar con el Festival Periferias o la cancelación de la programación de Etopia en Zaragoza.
Aún no se había cumplido un mes de la investidura de Azcón y, en pleno proceso de nombramientos, se hizo público que dos directores generales nombrados por Vox habían hecho apología del Franquismo en redes sociales. Esmeralda Pastor, directora general de Justicia y Jorge Valero, director general de Caza y Pesca, habían publicado en sus redes sociales mensajes en los que se ensalzaba el régimen franquista. Aunque Azcón se planteó su destitución, recibieron el apoyo de Vox y de Santiago Abascal y, a riesgo de una ruptura de la coalición, ambos siguieron en sus puestos y Azcón calificó sus declaraciones como “desafortunadas”.
El trasvase también ha estado en el candelero desde el principio. De hecho, fue el gran escollo en las negociaciones con el PAR para formar un tripartito, puesto que la política hidráulica del PAR y de Vox son opuestas. En las votaciones en las Cortes de Aragón sobre el trasvase a Cataluña ambas formaciones emitieron su voto por separado.
Otro de los temas que no tuvo tanto eco mediático fue la reintroducción del lince. El Consejero de Agricultura, Ángel Samper, desautorizó la propuesta del Departamento de Medio Ambiente, dirigido por Manuel Blasco. Como respuesta, el PP dejó el asunto del lince olvidado.