Diplomacia de camuflaje
0
En cualquiera de esas numerosas escuelas o institutos de posgrado que imparten másteres o cursos de liderazgo y de gobierno se enseña entre sus primeras lecciones que la agenda internacional debe quedar al margen de los enfrentamientos sobre asuntos domésticos. Por desgracia son muchos los dirigentes, sobre todo populistas, que desoyen este consejo pero muy pocos alcanzan el grado de arbitrariedad con que Sánchez usa la política exterior como instrumento electoral o vía de escape de conflictos internos. Ha convertido la diplomacia en una caprichosa herramienta de campaña que lo mismo le sirve para agitar choques ideológicos que para guarecerse ante ciertas acusaciones delicadas o para abrir polémicas artificiales con las que disimular su debilidad parlamentaria. Y es preciso reconocer... Ver Más