Ikfem traza sobre 'A Raia' un puente al 25 de abril

El puente internacional que conecta Galicia con Portugal, alzándose sobre el Miño, no tendrá la envergadura y fama del 25 de abril, que atraviesa Lisboa sobre el Tajo. Pero ambos tienen una potente carga simbólica: el primero, porque hermana físicamente a dos territorios que se confunden donde se besan sus límites, en 'A Raia'; el segundo, porque toma su nombre de la célebre Revolución de los Claveles, que este año ha cumplido medio siglo. Cerrando el paralelismo, la 12ª edición del festival transfronterizo Ikfem (17-21 de julio), a caballo entre Tui y Valença do Minho, hará un guiño a aquel hito que restauró la democracia lusa. «Me gusta estar atenta a lo que está ocurriendo en la actualidad. Qué está pasando, en qué momento estamos», explica Andrea González, directora de Ikfem, desde Madrid, en conversación telefónica con ABC. «Cada año nos hacemos eco de diferentes situaciones sociales», incide. Evoca el ejemplo del año pasado, cuando se posicionaron ante la guerra en Ucrania con la participación de una joven pianista procedente de este país, y acogida en Vigo. Este año, avanza, harán «mucho hincapié en la agenda cruzada» que comparten España y Portugal en las cumbres ibéricas. Y también se harán «eco» del 50 aniversario de aquella revolución que puso fina a la dictadura, con «algo totalmente extraordinario, de nivel nacional»; como «embajadores» de la «cultura ibérica» y el «cruce cultural» entre ambos países, el recuerdo de ese momento histórico «tiene que estar presente en el festival», enfatiza, sin poder entrar, por ahora, en detalles. González afina las respuestas para no revelar más de la cuenta: el programa al completo no se desvelará hasta final de mes. Toca preservar el misterio. Pero el primer anuncio, hecho esta misma semana, ya ha generado una «gran expectación»: la inauguración correrá a cargo del piano de Marcos Mezquida (Menorca, 1987) y la voz de Salvador Sobral (Lisboa, 1989), que brindarán en Valença un concierto bautizado como 'Cosa de dois' . El balear aúna el jazz, la libre improvisación, la música clásica, barroca y contemporánea con el rock, el folklore y el flamenco. Mientras que la personalísima voz del lisboeta la puso en el mapa su triunfo en Eurovisión. 'Cosa de dois', el concierto de Mezquida y Sobral que abre el festival, ha generado una gran expectación CEDIDA El resto de actuaciones seguirán esta misma pauta, con los «grandes sellos» que identifican a Ikfem: eventos únicos, con fusiones sorprendentes, siempre bajo el denominador de la innovación –«me sale de una manera bastante natural», admite González–, hermanando artistas españoles y portugueses, portugueses y españoles. Siempre bordeando la fina línea de generar interés y no exponer ningún secreto, pone como ejemplo la fusión de «rock con sinfónico». Se abrirán así cinco días que reafirmarán a este festival como puente musical, cultural y creativo ; que conecta personas y países, con diferentes estilos y gustos, de distintas generaciones; buscando el punto exacto de fusión; que va más allá de la música, con cabida para otras disciplinas –moda, cine, gastronomía–; y que saca partido a escenarios como el propio puente internacional, el barrio histórico de Tui, la Fortaleza de Valença o el mismísimo Miño, desde donde tuvo lugar una actuación acuática inédita, con un piano flotante, hace un año. «Grabado en la piel» Porque el gran reto de cada edición, subraya la directora del festival, no es otro que «sorprender», brindar experiencias inolvidables . «Lo más especial», cuenta, es el contacto con el público, cuando, tiempo después, todavía evoca ese momento singular que vivió en Ikfem y le ha quedado «grabado en la piel». Andrea González, pianista y gestora cultural, dirige el festival CEDIDA Natural de Tui, a la localidad pontevedresa regresó en su día González tras residir y formarse en puntos tan dispares como Italia, Reino Unido (Londres) y, dentro de España, Valencia. «Vivo viendo Portugal, literalmente. Todas las mañanas me despierto y lo que veo por mi ventana es Portugal, es el río, es el puente», detalla. «Creces con una apertura diferente, cuando estás viendo otro país ». Y Portugal, por más que «nos parecemos mucho», reflexiona, tiene «sus diferencias», porque «cada uno tiene su identidad», y «ahí esta la riqueza». Esa riqueza de la que se nutre año a año el festival Ikfem.