El SAS firmará 10.000 contratos de entre uno y tres meses para el plan de verano de 2024

El Servicio Andaluz de Salud realizará 10.000 contratos de entre uno y tres meses de profesionales sanitarios entre los meses de junio y septiembre para el plan de verano de 2024. Con esta cifra, el objetivo de la Junta de Andalucía es poder mantener un dispositivo similar al del pasado año con los centros de salud abiertos por la mañana (y con cierres por la tarde en función de la demanda), refuerzo en las zonas más turísticas y en torno a un 80% de los quirófanos abiertos y un 90% de las camas. Esto supuso un gasto el pasado ejercicio de en torno a 143 millones de euros. La consejera de Salud, Catalina García, expuso este plan en una comparecencia en el Parlamento en la que advirtió que este verano será especialmente complejo cubrir las vacaciones y mantener el ritmo de los servicios sanitarios. El motivo es que al déficit habitual de profesionales en la bolsa se añade que este año debería finalizar el MIR la promoción de residentes que empezaron la formación en el año 2020 durante la pandemia. Otros años, sin embargo, este proceso finalizó en el mes de junio. «Esta demora supone una limitación de la que ya advertimos al Ministerio pero no obtuvimos una respuesta», explicó la consejera, quien resumió de forma gráfica la situación para este verano: «Vamos a tener que hacer encaje de bolillos para cuadrar la disponibilidad». Con esta dificultad añadida, el plan anunciado por la consejera de Salud sitúa como primera prioridad la contratación de personal para dotar a todos los centros de salud. En esta línea, Catalina García , admitió que como ha ocurrido otros veranos «la mayor dificultad se producirá en las áreas más alejadas de los municipios dado que la mayoría opta por centros de referencia», Como segunda prioridad, la consejera situó el ajuste de los recursos asistenciales existentes con una disponibilidad de quirófanos en torno al 80% y el 90% de las camas disponibles , lo que permitirá que haya más oferta de plazas «que demanda en los meses de verano». Esto implicará el paso de jornadas de consultas de agenda de la tarde a la mañana (ante el descenso de asistencia por la tarde por el calor), la apertura en las capitales en horario de tarde, o los refuerzos de personal de acuerdo con las limitaciones. «Nuestra previsión es que se apliquen medidas para que se abran en horario de mañana los 1.513 centros de atención primaria y en horario de tarde en función de la demanda. En tercer lugar, como es habitual, se prevén refuerzos en las zonas costeras con un incremento de personal en las áreas con más afluencia turística y una adaptación de los servicios en función de la demanda siguiendo el modelo que se aplicó en 2023 que de acuerdo con la Junta de Andalucía funcionó de forma adecuada. Dudas del PSOE y respuesta de la Consejería El Grupo Parlamentario Socialista, que fue quien solicitó la comparecencia de la consejera de Salud, Catalina García, criticó que se siga el modelo de dispositivo de verano de 2023 que tachó como «drama y horror» , culpó a la temporalidad y a la falta de estabilidad de la falta de profesionales en las bolsas de empleo. «Hay pocos médicos porque los despiden y les ofrecen contratos de uno o dos meses. ¿Quién se va a quedar en Andalucía?», se preguntó la diputada María Ángeles Prieto. En este sentido, el PSOE advirtió de que entre los 10.000 contratos de uno a tres meses que se van a realizar para el plan de verano se encuentran parte de los 7.000 profesionales de refuerzo contratados por la Covid cuyos contratos finalizan el 31 de mayo. «El compromiso era que iban a tener un contrato hasta fin de año, y sin embargo, volverán a tener contratos de uno o dos meses. ¿Cuántos de estos profesionales se querrán quedar en Andalucía?«, cuestionó Prieto. Ante estas palabras, la consejera lamentó la actitud del PSOE y estableció una batería de comparativas entre las cifras de 2018 y las actuales para establecer como conclusión que la situación es « mucho mejor ahora que entonces »: «Usan la sanidad como arma arrojadiza, para generar un estado de alarmismo frente a los colectivos más vulnerables. Reconocemos problemas e incidencias en la asistencia sanitaria. Pero la sanidad pública está mejor que cuando ustedes gobernaban. Los datos matan el relato de la oposición».