Un preso se atrinchera y agrede a varios funcionarios: «Venid, que os mato uno a uno»

El pasado sábado una pelea entre reclusos en la prisión pontevedresa de A Lama derivó en un grave altercado que acabó con un funcionario herido y puso el foco, de nuevo, en los problemas de la convivencia intramuros. Todo empezó, denuncian a ABC desde el sindicato 'Tu abandono me puede matar', cuando dos funcionarios detectaron un comportamiento extraño entre tres internos. Al aproximarse confirmaron que uno de ellos estaba herido , sangrando, y que había sido agredido por los otros dos, por lo que les solicitaron que los acompañasen a una zona de seguridad para cachearlos. El único que accedió en primer término fue el propio agredido, que tuvo que ser redirigido a la enfermería, pero los otros dos se negaron . En una segunda intentona, los funcionarios convencieron a uno de los atacantes de que los acompañase, «momento que el otro aprovechó para entrar en el gimnasio». «Ahí se armó con mancuernas y con una barra de hierro de un metro» con la que amenazó al personal de la prisión al tratar de reducirlo. «Nosotros no llevamos porras ni nada, solo un walkie» aclaran desde el penal, por lo que sus peticiones no fueron atendidas. Al verse cercado por los refuerzos, el preso, muy nervioso, decidió atrincherarse en la biblioteca de la cárcel. Para impedir la entrada de los funcionarios el reo empleó mobiliario de la estancia, que rompió para tapiar la entrada. «Venid que os voy a matar uno a uno» les dirigió según el relato de los testigos . Al confirmar que estaba lanzando objetos contra los trabajadores, el jefe de servicios dio la orden de que los funcionarios se protegiesen y echasen mano de los medios coercitivos que tienen a su disposición en el módulo, pero que solo pueden emplear si les dan luz verde ante una situación de gravedad, entre los que se cuentan cascos, escudos, porras y esposas. El recluso acabó siendo reducido después de herir en la cabeza a uno de los funcionarios que, «por fortuna», llevaba el casco puesto. Sobre lo ocurrido, el sindicato 'Tu abandono me puede matar' revela que la falta de personal es palmaria y afecta a la convivencia y a la seguridad dentro del penal. «Hay días que está un solo funcionario para 60 presos» , denuncian para explicar que muchos de ellos son personas que deberían estar ingresadas en primer grado (el más restrictivo de todos) pero que entran en segundo grado «para falsear la estadística». «El reglamento dice que los reclusos inadaptados tienen que ser clasificados en primer grado, que es el más restrictivo, pero esto no se hace y tiene consecuencias», aseguran. MÁS INFORMACIÓN estandar No El asesino confeso de Morata de Tajuña ingresa en un módulo de aislamiento en Teixeiro (A Coruña) Desde un penal en el que cumplen condena alrededor de 900 presos , el sindicato carga las tintas contra Instituciones Penitenciarias, a los que acusan de no velar por su integridad. «Existe más agresividad y un efecto contagio» , recalcan los encargados de velar por el buen funcionamiento de estos recintos donde «la vida de los presos depende de nosotros». «Si un preso ataca a un compañero y a esta persona le pasa algo la responsabilidad es nuestra, pero no tenemos los medios» reprochan para criticar que, en su caso, el rasero está muy elevado. «Si escupes o insultas a otro funcionario puede ser considerada una agresión. En nuestro caso no, debe irnos en el sueldo» , aseguran ante una situación en la que la convivencia se complica por momentos.