La poderosa infusión que se prepara con una hierba medicinal que proviene de la India: es antiinflamatoria y fortalece el sistema inmunológico
Originaria de la India y perteneciente a la familia del jengibre, la cúrcuma es reconocida por su uso como especia y colorante, aportando un vibrante tono anaranjado a diversos platos, desde el curry hasta otras delicias tradicionales.
Sin embargo, su valor va más allá de su función culinaria, ya que se ha revelado como un tesoro para la salud al integrarla como infusión. ¿Qué propiedades aporta? Un artículo del sitio web elmueble.com detalla cada uno de sus beneficios y cuál es la mejor forma de prepararla.
Infusión de cúrcuma: ¿qué beneficios aporta a la salud?
La cúrcuma despliega todo su potencial cuando se integra en una infusión. Esta infusión, cargada de propiedades antiinflamatorias y fortalecedoras del sistema inmunológico, promueve el bienestar general. Algunos de sus beneficios más destacados incluyen:
- Antioxidante: Ayuda a prevenir enfermedades como la diabetes al eliminar los radicales libres y proteger las células del daño.
- Digestivo: Favorece la secreción biliar, siendo recomendada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) para tratar la indigestión.
- Alivio de la artritis: Actúa como antiinflamatorio, aliviando el dolor y otros síntomas asociados con la artritis.
- Mejora la función cerebral: Contribuye a la protección neuronal y puede reducir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Paso a paso, cómo preparar la infusión de cúrcuma
La mejor manera de disfrutar de los beneficios de la infusión de cúrcuma es después de las comidas, preferiblemente por la noche, para permitir que sus efectos actúen mientras el cuerpo descansa.
Una receta recomendada incluye ingredientes como jengibre, manzana y canela para potenciar sus propiedades y sabor. Seguí estos sencillos pasos para prepararla:
Infusión de cúrcuma: precauciones y contradicciones
A pesar de sus numerosos beneficios, la infusión de cúrcuma puede no ser adecuada para todos. Según la médica Debra Rose Wilson, que cita el artículo escrito por Pablo Sánchez-Montañés, algunos grupos de personas deben evitar su consumo debido a posibles efectos secundarios.
Entre este grupo se encuentran mujeres embarazadas o en período de lactancia y personas con problemas estomacales o cardíacos.
La infusión de cúrcuma, con su poder antiinflamatorio y fortalecedor del sistema inmunológico, se posiciona como un valioso recurso para mejorar la salud y el bienestar.