Senadores argentinos se aumentaron 170% su salario por unanimidad: cobrarán AR$4.5 millones por mes
El Senado argentino retomó sus sesiones y el ambiente político se caldeó notablemente. Al cierre de la sesión, luego de aprobar los nombramientos de varios embajadores, incluyendo al rabino de Javier Milei, Victoria Villarruel sometió a votación el proyecto 615/24, el cual aumentaba en un 170% los ingresos de los senadores.
La propuesta fue aprobada por votación a mano alzada, lo que resultó en un aumento salarial significativo para los ocupantes de las 72 sillas del Senado, pasando de 1,5 millones a 4,5 millones de pesos argentinos (unos US$5 mil al día de hoy), con la posibilidad de recibir hasta dos millones adicionales por conceptos como representación y desarraigo.
Sin embargo, la controversia no tardó en surgir. Tras conocerse los detalles del proyecto, tanto en redes sociales como en medios de comunicación, se desató un fuerte debate sobre este incremento salarial récord. Fue entonces, y no antes, que el Presidente expresó su indignación, tratando de desligar a su partido del aumento y señalando a otros bloques por haber apoyado la medida.
Esta postura presidencial generó sorpresa, ya que el proyecto de aumento de salarios contaba con el respaldo de todos los bloques parlamentarios, incluido el de La Libertad Avanza, cuyo representante Bruno Olivera fue clave en la iniciativa.
Tras la polémica, Olivera reconoció su error y se retractó de sus acciones, argumentando que había cometido un error de juicio.
Por otro lado, las declaraciones de Milei sobre sus diputados no concordaron con las prácticas habituales del Senado. En las votaciones a mano alzada, aquellos en desacuerdo deben expresar su posición en voz alta o abstenerse mediante una carta dirigida a la secretaría académica. Sin embargo, solo dos senadores (de la UCR) optaron por este último procedimiento.
En cuanto a Victoria Villarruel, presidenta de la sesión y vicepresidenta del Poder Ejecutivo, trató de justificar el aumento salarial argumentando su legalidad y señalando que contaba con el respaldo de todos los bloques parlamentarios. Aunque lamentó las críticas recibidas, no especificó si estas iban dirigidas a la oposición o a otros sectores, y confirmó que el aumento contaba con un amplio apoyo.
En los pasillos del Senado se comenta que este aumento salarial fue parte de un acuerdo para obtener votos favorables en los nombramientos de embajadores, siendo Axel Wahnish, rabino de Milei, uno de los principales involucrados debido a su postura respecto al traslado de la sede consular de Tel Aviv a Jerusalén.
A pesar de las críticas iniciales, la magia de la negociación política permitió su aprobación, aunque Milei ahora niegue la práctica habitual de la rosca política en su bloque parlamentario.
En una realidad paralela a la de los senadores, Argentina sigue con una pobreza estremecedora y galopante. “La incidencia proyectada es un promedio ponderado de una tasa de pobreza estimada en 44,9% para el cuarto trimestre de 2023 y 51,8% para el primer trimestre de 2024”, se explica en un informe de la Universidad Di Tella de Buenos Aires.
Al darle un seguimiento a los datos, se encuentra que se sumaron más de 3.2 millones de nuevo pobres desde que asumió el gobierno ultaderechista.