Cierra la popular Cafetería Milán, santuario de los churros con chocolate en Córdoba

¿Quién no ha probado en Córdoba los churros de Cafetería Milán ? Es uno de los santuarios hosteleros clásicos donde los haya. En pleno centro de Córdoba, junto al bulevar Gran Capitán , en el pasaje interior o en la terraza de uno de los lugares más transitados de la capital cordobesa. Compras, trabajadores, meriendas, familias , niños, caprichos, reuniones, desayunos... Todo el ajetreo de un día cualquiera resumido en un bar que está en el imaginario de los cordobeses. Hace menos de una semana, su actual propietario Francisco Almansa ha tenido que tomar la dura decisión de cerrarlo cuando alcanza los 45 años. Razones personales le han llevado a colgar el siempre inevitable cartel de 'Se traspasa' o 'Se vende' sin que el bullicio que durante 18 horas diarias acompañaba este rincón de Córdoba se sienta. Desde que se abrió por primera vez en 1979, Cafetería Milán sólo había cerrdo dos meses por la pandemia de coronavirus. Sus anteriores dueños, Emilio Muñoz y Vicente García, no tuvieron más remedio tras el revés tan duro para la hostelería que supuso la Covid-19. Siguieron adelante y tras el verano de 2022 se produjo el relevo y Paco Almansa, hombre del sector, se hizo cargo del mismo. Desde hace 45 años esta cafetería ha dejado su huella en el pasaje que lleva su nombre gracias a los churros con chocolate. Especializada en desayunos, ha ofrecido los típicos lazos conocidos como 'churros de patata', acompañados de un servicio acogedor y casi personalizado, pues la recurrencia de clientes fijos era inmensa. Mesas llenas y gente de pie esperando a que quede alguna libre. Ésta solía ser la estampa habitual en la cafetería Milán. siempre a buen precio tanto los churros de lazo como los jeringos y aparte buen tapeo, raciones, menús y comida para llevar. Ahora busca a alguien que quiera reabrir un trozo de la historia reciente de Córdoba. «Novios parece que no le faltan», comenta Almansa.